Por Ori Lewis
RAMAT GAN (Reuters/EP) - El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, aceptó el domingo la meta respaldada por Estados Unidos de crear un estado palestino pero se negó a cumplir con la demanda del presidente Barack Obama de suspender la expansión de asentamientos judíos.
El cambio de opinión de Netanyahu sobre la creación de un estado pareció ser un intento por terminar con la peor fisura en las relaciones entre Estados Unidos e Israel en una década. Pero parecían avecinarse mayores tensiones por su negativa a ceder respecto a los asentamientos.
Netanyahu dijo que respaldaría la creación de un estado palestino, pero sólo si su país recibe garantías internacionales por adelantado de que la nueva nación no tendrá un Ejército y si los palestinos reconocen a Israel como un estado judío.
Un portavoz del presidente palestino Mahmoud Abbas dijo que las declaraciones de Netanyahu no eran suficientes. Los palestinos por mucho tiempo se han resistido a llamados a declarar que Israel es un estado judío.
"Si recibimos esta garantía para la desmilitarización y hay acuerdos de seguridad requeridos por Israel, si los palestinos reconocen a Israel como una nación del pueblo judío, estaremos preparados para un verdadero acuerdo de paz (y) para alcanzar una solución de un estado desmilitarizado palestino junto al Estado judío", dijo Netanyahu.
ASENTAMIENTOS
Pero el primer ministro israelí mantuvo su negativa a declarar un completo congelamiento a la construcción de asentamientos que Washington exige bajo una "hoja de ruta" hacia la paz del 2003.
"No tenemos intenciones de construir nuevos asentamientos ni de expropiar tierra para nuevos asentamientos", dijo Netanyahu en la Universidad Bar-Ilan de Tel Aviv.
"Pero hay una necesidad de permitir a los colonos llevar vidas normales, de permitir a madres y padres criar a sus hijos como todas las familias alrededor del mundo", sostuvo, refiriéndose al concepto de "crecimiento natural" o construcción en asentamientos existentes.
Obama dijo el 4 de junio en un discurso destinado a reparar las relaciones estadounidenses con los musulmanes que la construcción de asentamientos debe terminar.
En su discurso, Netanyahu, jefe de un Gobierno de coalición derechista, reiteró su disposición para reunirse con líderes árabes e instó a los palestinos a retomar las conversaciones de paz.
Pero sobre el delicado tema de los refugiados palestinos, Netanyahu reiteró una antigua política israelí al decir que no podían regresar a áreas en Israel de las cuales huyeron o que fueron obligados a abandonar durante una guerra de 1948 que llevó a la creación del estado judío.
Israel dice que esta influencia borraría la identidad judía del país.
No fue inmediatamente evidente si Abbas aceptaría el llamado de Netanyahu a retomar las conversaciones.
Abbas ha dicho que las charlas con Israel no pueden retomarse hasta que Netanyahu acepte la meta de una solución de dos estados y suspenda la construcción de asentamientos. Un congelamiento a la construcción podría dividir a la coalición gobernante que llegó al poder en Israel en marzo pasado.