MADRID, 5 Ene. (EUROPA PRESS) -
La directora ejecutiva del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), Henrietta Fore, ha condenado este martes los "horribles ataques" ejecutados el sábado por presuntos yihadistas contra dos localidades situadas en el oeste de Níger, que se saldaron con la muerte de cerca de cien civiles, entre ellos 17 niños.
"Estoy profundamente preocupada por los horribles ataques perpetrados el sábado pasado por grupos armados no estatales contra civiles en las aldeas nigerinas de Chombangú y Zaroumadareye, cerca de la frontera con Malí", ha señalado Fore a través de un comunicado.
En el mismo, ha destacado que "informes no confirmados indican que todos los niños que perdieron la vida (diez niños y siete niñas) tenían menos de 16 años". "Algunos, aparentemente, murieron quemados", ha lamentado, antes de agregar que "un número indeterminado" de niños sufrieron heridas graves en los ataques, mientras que otros se han visto desplazados y separados de sus familias.
"Estos acontecimientos terribles llegan después de otro ataque brutal, el pasado mes de diciembre, en Toumour, en la región de Diffa, que dejó 45 muertos, incluidos diez niños. Ese ataque destruyó reservas vitales de alimentos, infraestructura de agua y dos aulas, dejando casi 21.000 personas afectadas", ha recordado.
Por ello, Fore ha hecho hincapié en que "esta violencia gratuita y el desprecio por la vida de los niños y las familias deben condenarse en los términos más enérgicos", al tiempo que ha señalado que "estos actos atroces son graves violaciones de los derechos de los niños, del Derecho Humanitario y de los Derechos Humanos".
"UNICEF pide el cese inmediato de los ataques contra los niños, sus familias y comunidades", ha dicho Fore, quien ha trasladado además el pésame del organismo a las familias de las víctimas y ha reafirmado el apoyo de UNICEF "a los niños y las familias de Níger".
Por último, la directora ejecutiva del organismo internacional ha apuntado que "UNICEF sigue dispuesto a apoyar al gobierno de Níger para ayudar a los supervivientes y a las poblaciones afectadas, y para proteger los derechos de todos los niños".
Los ataques fueron ejecutados contra las aldeas de Chombangú y Zaroumdareye, cerca de la frontera con Malí. El alcalde de la localidad de Tondikiwindi de la que dependen administrativamente las dos aldeas, explicó el domingo que son 70 muertos los en Chombangú y 30 en Zarumdareye, según la emisora Radio France Internationale.
El alcalde de Tondikiwindi ha detallado que los ataques y la matanza de civiles llegaron como represalia después de otro intento de asalto previo que fue rechazado por jóvenes organizados como fuerzas de autodefensa, que mataron a dos de los asaltantes.
El Gobierno nigerino anunció el lunes un luto nacional de tres días a partir de este mismo martes y anunció un refuerzo del dispositivo de seguridad en la zona, así como medidas para evitar conflictos intercomunitarios, tal y como ha recogido el portal de noticias ActuNiger.
Esta región es conocida como la de las tres fronteras por la cercanía de las demarcaciones de Níger, Burkina Faso y Malí y es objetivo habitual de los grupos yihadistas. En los últimos meses ha habido repunte de estos ataques, principalmente obra de Estado Islámico en el Gran Sáhara (ISGS), Boko Haram y su escisión, Estado Islámico en África Occidental (ISWA).
Boko Haram e ISWA han centrado sus ataques en la cuenca del lago Chad, mientras que ISGS y el Grupo de Apoyo al Islam y los Musulmanes (JNIM), filial de la organización terrorista Al Qaeda en Malí, lo han hecho en la frontera que conforman Níger, Malí y Burkina Faso.