Publicado 23/07/2020 17:08

Nigeria.- Estado Islámico ejecuta a cinco trabajadores humanitarios secuestrados en el noreste de Nigeria

Nigeria.- Estado Islámico ejecuta a cinco trabajadores humanitarios secuestrados
Nigeria.- Estado Islámico ejecuta a cinco trabajadores humanitarios secuestrados - GETTY IMAGES / MARTYN AIM - Archivo

MADRID, 23 Jul. (EUROPA PRESS) -

El grupo yihadista Estado Islámico en África Occidental (ISWA) ha ejecutado a cinco trabajadores humanitarios a los que secuestró en junio en la carretera que conecta las ciudades nigerianas de Monguno y Maiduguri, en el estado de Borno (noreste).

El vídeo publicado por el grupo, de poco más de 30 segundos de duración, muestra a cinco combatientes encapuchados detrás de los cinco rehenes, que aparecen arrodillados y con los ojos vendados. "Este es un mensaje a los infieles que os usan para engañar y convertir a la gente en infieles", dice una voz en hausa.

"Debéis saber que vuestros empleadores sólo os usan para lograr sus objetivos, pero no se preocupan por vosotros. Por eso, cuando os secuestramos, no se preocupan por vosotros", agrega, según ha informado el diario nigeriano 'Premium Times'.

"Nuestro consejo es que os arrepintáis y volváis a Dios ya que, de lo contrario, seguiremos abordándoos o secuestrándoos en todas las rutas que recorráis. Si no escucháis nuestra advertencia, lo que les va a pasar a estos cinco trabajadores humanitarios será también vuestro destino", advierte.

El presidente de Nigeria, Muhammadu Buhari, ha condenado la ejecución de los secuestrados, que trabajaban para la Agencia de Gestión de Emergencias de Borno, Acción Contra el Hambre, Rich International y el Comité Internacional de Rescate, según un comunicado de la Presidencia del país africano.

El portavoz de la Presidencia, Garba Shehu, ha destacado que Buhari "asegura que el Gobierno seguirá haciendo todo lo que pueda para asegurar que todo vestigio de Boko Haram es arrancado totalmente del noreste de Nigeria y que los responsables de esta atrocidad hacen frente a la ley".

Las autoridades de los países de la región utilizan el nombre de Boko Haram para referirse indistintamente a la facción encabezada por Abubakar Shekau y la reconocida como rama del grupo yihadista Estado Islámico en la región, conocida como ISWA.

El presidente nigeriano ha dado además las gracias a las ONG afectadas por su "continuada dedicación y servicio a las víctimas de Boko Haram" y ha agregado que "las agencias de seguridad del estado (de Borno) trabajarán de cerca con sus organizaciones para aplicar medidas para garantizar que no vuelve a haber secuestros de su personal".

Las ejecuciones han sido igualmente condenadas por el coordinador de Naciones Unidas en Nigeria, Edward Kallon, quien se ha mostrado "horrorizado" por los asesinatos. "Mis sentidas condolencias a sus seres queridos, familiares, amigos y compañeros de trabajo", ha manifestado en un comunicado.

Así, ha destacado que las víctimas "eran trabajadores humanitarios comprometidos que dedicaron sus vidas a ayudar a personas y comunidades vulnerables en una zona muy afectada por la violencia" y ha agregado que "su seguridad y el lograr su liberación fueron las prioridades desde que fueron capturados el mes pasado".

"Condeno firmemente toda la violencia contra trabajadores humanitarios y los civiles a los que ayudan", ha señalado Kallon, quien ha mostrado su "preocupación" por "el número de puestos de control ilegales establecidos por grupos armados no estatales en las principales rutas de suministro".

"Estos puestos de control alteran la entrega de asistencia vital e incrementan los riesgos de que los civiles sean secuestrados, asesinados o resulten heridos, con los trabajadores humanitarios cada vez más señalados", ha apuntado, antes de recordar que "trágicamente, no son los primeros asesinatos de trabajadores humanitarios".

"FLAGRANTE VIOLACIÓN DEL DERECHO HUMANITARIO"

"Hemos pedido en repetidas ocasiones que este devastador destino y flagrante violación del Derecho Humanitario no se repita y, aún así, lo hace. Imploro a todas las partes armadas que incrementen sus responsabilidades y detengan los ataques contra trabajadores humanitarios y civiles", ha sostenido.

En este sentido, ha incidido en que "los trabajadores humanitarios y la ayuda que entregan a las poblaciones más vulnerables suponen la diferencia entre la vida y la muerte para comunidades completas", al tiempo que ha recordado que "casi ocho millones de personas necesitaban ayuda humanitaria urgente en el noreste de Nigeria a principios de año"

"A día de hoy, 10,6 millones de personas necesitan apoyo urgente en estados afectados por el conflicto mientras luchan frente a la pandemia de COVID-19", ha resaltado Kallon, quien ha hecho hincapié en que "en un momento en el que las necesidades humanitarias han llegado a niveles sin precedentes, es inaceptable que los que intentan ayudar sean atacados y asesinados".

"Este incidente no disuadirá a la comunidad internacional de entregar ayuda a millones de nigerianos que la necesitan desesperadamente en el noreste (de Nigeria). La comunidad humanitaria permanece en solidaridad con la gente de los estados de Borno, Adamawa y Yobe, que han sufrido largos años de conflicto y ahora necesitan protección ante un virus mortal", ha remachado.

A las condenas se han sumado ONG como Médicos Sin Fronteras (MSF) y Amnistía Internacional, que han pedido que los trabajadores humanitarios reciban protección. "Asesinarles es un crimen de guerra", ha recordado Amnistía a través de su cuenta en la res social Twitter.

PETICIÓN DE AYUDA

Los trabajadores humanitarios fueron secuestrados en junio en Borno y a finales de mes aparecieron en un vídeo en el que pidieron ayuda al Gobierno nigeriano y a sus ONG para lograr su liberación.

Los secuestrados aparecían en lo que parecía ser una zona boscosa y se identifican por su nombre y la organización para la que trabajan, antes de pedir ayuda para lograr su liberación.

Si bien ninguno de ellos desveló en el vídeo el grupo que les había raptado, la referencia a sus captores como soldados del califato parecía indicar que estaban en manos de ISWA.

ISWA ejecutó en diciembre de 2019 a cuatro trabajadores de Acción contra el Hambre secuestrados en julio de ese año en el noreste de Nigeria tras un ataque contra su vehículo cerca de la localidad de Damasak, un suceso que se saldó con la muerte de otro trabajador humanitario.