MADRID, 21 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Senado de Nigeria ha aprobado este martes una moción pidiendo a los jefes de las distintas ramas de las Fuerzas Armadas que dimitan debido al incremento de los ataques por parte de grupos yihadistas y criminales armados en distintos puntos del país.
La resolución reclama que los jefes del Ejército "den un paso a un lado" para permitir nuevas ideas en materia antiterrorista y para hacer frente a la creciente inseguridad, apenas tres días después de la muerte de más de 15 soldados en un ataque en el estado de Katsina.
Asimismo, al menos 18 personas murieron y más de 30 resultaron heridas en un ataque ejecutado el domingo contra una boda en la aldea nigeriana de Kukun-Daji, situada en el estado de Kaduna (norte), en medio del deterioro de la seguridad en esta zona del país.
Ali Ndume, responsable de introducir la moción, ha expresado su preocupación por el incremento del número de bajas en el seno de las Fuerzas Armadas y, además de aplaudir la labor de los militares, ha destacado que es necesario que cuenten con mejores condiciones y equipamiento.
"El Senado aprueba el sacrificio de nuestras Fuerzas Armadas en la lucha contra la insurgencia y el bandidismo y la protección de la integridad territorial", ha dicho, al tiempo que ha resaltado que "al Senado le preocupa que, si esta tendencia continúa, habría graves implicaciones" para la lucha contra la inseguridad.
Los senadores, que ya pidieron en enero al presidente, Muhammadu Buhari, una remodelación de la cúpula del Ejército, han solicitado además que se entregue un equipamiento más moderno a los militares para incrementar sus capacidades, según ha informado el diario nigeriano 'The Premium Times'.
Buhari pidió a mediados de junio "paciencia" a la población en el marco de las operaciones militares lanzadas en las semanas anteriores contra grupos criminales responsables de la muerte de decenas de personas en varios ataques ejecutados en el norte y el noroeste del país.
El país hace frente además a un incremento de las operaciones de Boko Haram y su escisión, Estado Islámico en África Occidental (ISWA), en el estado de Borno (noreste) y la cuenca del lago Chad, escenario de numerosas operaciones militares durante los últimos meses.