RÍO DE JANEIRO, 29 Abr. (Notimérica) -
Nueve empresarios investigados en la Operación Lava Jato de la trama corrupta de Petrobras han dejado este miércoles por la mañana la cárcel, después de que el Tribunal Supremo Federal (TSF) dictaminara que podían seguir cumpliendo condena en régimen domiciliar porque no existe riesgo de fuga.
Los empresarios están acusados por el Ministerio Público Federal de haber entregado sobornos a los antiguos directivos de Petrobras y a políticos de varios partidos para recibir a cambio contratos con la empresa estatal.
Los primeros en salir de las dependencias donde estaban detenidos en Curitiba han sido Gérson de Mello Almada (Engevix) y Ricardo Pessoa (UTC), a los que se les ha colocado tobilleras electrónicas para certificar que estarán retenidos en casa.
El resto de detenidos liberados son José Aldemário Pinheiro Filho, Agenor Franklin Magalhães Medeiros, José Ricardo Nogueira Breghirolli y Mateus de Sá Oliveira (OAS); Sérgio Cunha Mendes, de Mendes Júnio; João Ricardo Auler, de Camargo Corrêa; y Erton Fonseca, de Galvão Engenharia. La mayoría de ellos volverán a São Paulo, donde residen.
Estas constructoras y empresas de ingeniería están entre las más destacadas de Brasil y su implicación en el escándalo de Petrobras les está pasando factura; por el momento la petrolera decidió no firmar nuevos contratos con ninguna de ellas, pero los problemas legales a los que se enfrentan están provocando también problemas financieros, y como consecuencia, paralizaciones de obras en todo el país.
Los empresarios de la Operación Lava Jato son una parte del engranaje de la trama: en total, 25 personas entre empresarios, cambistas, políticos y operadoreos han sido condenados a prisión preventiva por la Justicia en el Estado de Paraná, donde se instruye el caso.
La semana pasada Petrobras divulgó los resultados del año pasado y confirmó que, por el momento, la corrupción en la compañía ha causado un agujero de al menos 2.000 millones de dólares.