Actualizado 09/06/2009 15:18

Nuevo desplome de comercio alemán nubla esperanzas reactivación

Por Noah Barkin

BERLIN (Reuters/EP) - Las exportaciones de Alemania reanudaron su caída en abril y las importaciones se contrajeron en forma aún más abrupta, atenuando las esperanzas de que la mayor economía europea pronto se recuperará de su recesión más profunda desde la Segunda Guerra Mundial.

Los datos de la Oficina Federal de Estadística mostraron que el superávit comercial subió levemente a 9.000 millones de euros (12.500 millones de dólares) en abril, sobre una base desestacionalizada.

Pero después de crecer en marzo por primera vez en seis meses, las exportaciones bajaron fuertemente, con una caída mensual de 4,8 por ciento a 63.000 millones de euros.

Las importaciones se desplomaron a un ritmo aún más veloz, con una caída de 5,8 por ciento a 53.900 millones, su desempeño más flojo desde noviembre del 2008.

Las cifras sugieren que Alemania, el mayor exportador mundial de bienes desde el 2003, sólo se recuperará lentamente desde un profundo declive, en el que el producto interno bruto (PIB) registró un colapso histórico de 3,8 por ciento en el primer trimestre.

"Este es un golpe serio", dijo Andreas Scheuerle de Dekabank.

El euro llegó a caer alrededor de un tercio de centavo contra el dólar tras la publicación de los datos, aunque luego se recuperó.

Economistas encuestados por Reuters habían estimado que el superávit comercial aumentaría a 9.400 millones de euros, con un alza de 0,2 por ciento mensual en las importaciones y una caída de 0,1 por ciento en las exportaciones.

Sobre una base sin ajustar, las exportaciones descendieron el 28,7 por ciento en abril a 63.800 millones de euros, la peor reducción desde la Segunda Guerra Mundial, mientras que las importaciones se contrajeron 22,9 por ciento a 54.400 millones.

Alemania es muy dependiente del comercio y como resultado ha sido más afectada por el declive global que muchas otras economías grandes.

La caída de la demanda internacional ha perjudicado a automotrices alemanas como Porsche y Opel, forzándolas a buscar ayuda del Gobierno.

BMW sufrió una caída de 24,9 por ciento en sus ventas estadounidenses de mayo. Las ventas de Volkswagen disminuyeron 9,1 por ciento.