Por Doug Palmer
WASHINGTON (Reuters/EP) - El presidente estadounidense, Barack Obama, instó el sábado al Gobierno iraní a "detener todas las acciones violentas e injustas contra su propia gente", mientras continúan en Irán las protestas por una supuesta manipulación de los comicios presidenciales de la semana pasada.
"El Gobierno iraní debe entender que el mundo está observando. Nosotros lloramos todas y cada una de las vidas inocentes que se pierdan", dijo Obama mediante un comunicado.
"Los derechos universales a asamblea y a expresarse libremente deben ser respetados y Estados Unidos está con todos quienes buscan ejercer esos derechos", agregó.
Las declaraciones de Obama aparecieron luego de el derrotado líder opositor Mirhossein Mousavi dijo que estaba "listo para el martirio", según un aliado, en momentos en que encabeza las protestas que provocaron advertencias de derramamientos de sangre por parte del líder supremo de Irán, el Ayatollah Ali Khamenei.
Funcionarios de la Casa Blanca dijeron que Obama, que evitó dar declaraciones directas sobre Irán o de la legalidad de la disputada elección, ha estado recibiendo actualizaciones durante el día acerca de la situación del país islámico y reuniéndose con sus principales asesores.
"Llamamos al Gobierno iraní a detener todas las acciones injustas y violentas contra su propia gente", dijo Obama.
Obama quiere evitar ser visto como "entrometiéndose" en la política interna iraní, pero al mismo tiempo enfrenta la presión de los republicanos de defender más firmemente a los opositores al presidente Mahmoud Ahmadinejad, que fue declarado ganador con una arrolladora victoria.
Desde que asumió el cargo, en enero de este año, Obama ha suavizado el tono de la diplomacia estadounidense hacia Irán, buscando retomar el diálogo con un Gobierno con el que Washington rompió relaciones poco después de que la revolución islámica derrocara al Gobierno del Sha, apoyado por Estados Unidos.
En los últimos años, Washington ha acusado a Irán de apoyar al terrorismo y de querer desarrollar armas atómicas. Teherán dice que su programa nuclear es pacífico y que son las fuerzas estadounidenses en las vecinas Irak y Afganistán las que crean inestabilidad en la región.