Por Peter Graff
KABUL (Reuters/EP) - La violencia y amenazas de insurgentes han afectado los preparativos para la elección del 20 de agosto en Afganistán e impedirían que un gran número de votantes acuda a las urnas, advirtió el domingo Naciones Unidas (ONU).
"La inseguridad representa una amenaza (...) para que un número significativo de afganos pueda ejercer su derecho al voto", precisó un reporte de la ONU, divulgado menos de dos semanas antes de los comicios.
"No sorprende que el temor así como la intimidación solapada y abierta que caracteriza a la insurgencia genere reticencia subyacente a (la hora de) aspirar a un cargo y hacer campaña o de votar", expresó el reporte.
Los talibanes han dicho que planean interrumpir los comicios, catalogados por el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, como la prueba más importante de este año al avance político logrado por Afganistán.
Obama ha apostado miles de soldados adicionales en el país para que ayuden a garantizar la seguridad durante la votación.
El mandatario afgano, Hamid Karzai, quien se ha asegurado el respaldo de poderosos jefes regionales, sería reelegido frente a una oposición dividida.
Pero diplomáticos temen que si persiste la violencia durante el día de la elección y las amenazas reducen fuertemente la concurrencia a las urnas o se dan acusaciones de un fraude a gran escala sea difícil que el resultado sea considerado legítimo.
La violencia en Afganistán ha alcanzado sus niveles más altos desde que los talibanes fueron expulsados del poder en el 2001, especialmente en el sur y en el este del país.
En las zonas más violentas, es cada vez menor la concurrencia a los mítines políticos, porque las personas temen que haya ataques, precisó el reporte de la ONU.
En algunas provincias -como la sureña Ghazni- los candidatos simplemente decidieron no realizar campañas.