Publicado 21/01/2021 06:57

ONU.- En Asia y el Pacífico 1.900 millones de personas tienen dificultades para seguir una dieta sana por la pandemia

La ONU alerta de los altos niveles de desnutrición en Asia y el Pacífico
La ONU alerta de los altos niveles de desnutrición en Asia y el Pacífico - 2018 GETTY IMAGES / ALLISON JOYCE - Archivo

MADRID, 21 Ene. (EUROPA PRESS) -

Unos 1.900 millones de personas en la región de Asia y el Pacífico tienen dificultades para acceder a una dieta sana debido al impacto económico de la pandemia del coronavirus y el aumento de los precios de los alimentos, ha advertido este miércoles la ONU.

Según un informe presentado por cuatro agencias de Naciones Unidas, se estima que 699 millones de personas en el mundo sufren malnutrición, más de la mitad de ellas en Asia. En países como Afganistán son cuatro de cada diez personas.

Por otro lado, más de 350 millones de personas en la región de Asia-Pacífico están pasando hambre porque la pandemia de coronavirus está destruyendo sus trabajos y encareciendo la comida.

Según las cifras del documento, unos 140 millones de personas cayeron en la pobreza extrema en 2020 debido al impacto del virus y los confinamientos, sumados a unos 265 millones de personas que ya sufrían inseguridad alimentaria grave.

Por otro lado, se estima que 74,5 millones de niños menores de cinco años tienen un retraso en el crecimiento debido a la malnutrición, mientras que unos 31,5 millones de menores perdieron peso de forma extrema.

"Debido a los precios más altos de las frutas, verduras y productos lácteos, se ha vuelto casi imposible para las personas pobres en Asia y el Pacífico lograr dietas saludables, cuya asequibilidad es fundamental para garantizar la seguridad alimentaria y la nutrición para todos, y para las madres y niños en particular", advierte el informe.

Esta crisis alimentaria es desigual, señalan, ya que "las familias más pobres con ingresos menguantes alteran aún más sus dietas para elegir alimentos más baratos y menos nutritivos".

Pero no solo destacan la falta de alimento, sino el "rostro cambiante" de la desnutrición, fomentada cada vez más con alimentos altamente procesados y económicos, fácilmente disponibles en la región.

La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), el Programa Mundial de Alimentos (PMA) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) firman este informe.

Las cuatro agencias instan a las autoridades de la región a invertir más en nutrición y seguridad alimentaria para promover dietas saludables, sí como regular las ventas y la comercialización de alimentos para los consumidores, especialmente los niños.