NUEVA YORK, 3 Oct. (EP/AP) -
El canciller de Costa Rica, Bruno Stagno, pidió ayer a la ONU que emprenda amplias reformas, que acepte más autocrítica y que aprenda de sus errores para que pueda encarar mejor los múltiples problemas que aquejan al mundo.
"Tenemos que tener el coraje de mirarnos al espejo, como organización y como Estados miembros", declaró el canciller en su discurso ante la Asamblea General de la ONU, celebrada en Nueva York. "No podemos permitir que algunos errores agrieten las fundaciones de esta organización. Debemos aprender de nuestros errores, debemos tener espacios para la autocrítica", añadió.
Stagno manifestó que "no es sano para la credibilidad y la efectividad de esta organización si cada vez que pasamos por situaciones difíciles e incómodas, nos limitamos a producir un informe para el archivo".
Costa Rica, país conocido por la diversidad de sus recursos naturales, pide a las demás naciones que hagan más para combatir el cambio climático a fin de proteger los delicados ecosistemas, según Stagno. "Es hora de saldar nuestra deuda con la naturaleza. No podemos seguir desnaturalizando la evidencia del cambio climático. Por inconveniente que sea la verdad, y la cuota de responsabilidad de cada uno, la verdad está aquí con nosotros y nos lo recuerda año con año, cada vez con mayor frecuencia", afirmó.
El canciller aseguró que Costa Rica está haciendo su parte para proteger la naturaleza pero "por más sostenido que sea nuestro compromiso a nivel nacional, nuestros esfuerzos quedan diluidos si no son correspondidos por un compromiso similar en otras latitudes".
Además, el líder costarricense lamentó la enorme cantidad de recursos que se gastan cada año en la producción de armas y afirmó que "la seguridad no se obtiene multiplicando las armas, la historia ya nos lo ha demostrado demasiadas veces. La seguridad se logra remediando injusticias, aliviando carencias, creando oportunidades para que exista un régimen de prosperidad colectiva a la par de la seguridad colectiva".
En ese sentido, Stagno opinó que la lucha contra el terrorismo se debe librar atacando las causas que lo fomentan, "debe tener como fin el prevalecer no sólo sobre los terroristas, sino también sobre las causas profundas de las cuales extraen fuerza y que los hacen renovables (...)(como) la pobreza y la desesperanza".