Actualizado 19/09/2006 20:27

ONU.- 'Lula' lamenta que los fondos empleados en la Guerra de Irak no hayan sido empleados en los Objetivos del Milenio


Nueva York, 19 Sep. (del corresponsal de EUROPA PRESS Carlos López) -

El presidente de Brasil, Luis Ignacio 'Lula' da Silva, lamentó hoy ante el plenario de la 61 Asamblea General de Naciones Unidas (ONU) que la guerra de Irak haya empleado suficientes fondos que podrían haber sido destinados a la consecución de los Objetivos del Milenio y que sólo ha alentado el fundamentalismo y la intolerancia.

En el primer discurso de un jefe de Estado dentro del plenario, Lula destacó que la Segunda Guerra del Golfo ha costado cientos de miles de millones de dólares. "Con mucho menos se podría haber cambiado la triste realidad de un amplio porcentaje de la población mundial (...) así como millones de vidas", indicó.

"La guerra nunca lleva consigo más seguridad (...), nadie está a salvo en un mundo de injusticias", explicó el jefe de Estado brasileño. "La guerra sólo puede generar monstruos, amargura, intolerancia, fundamentalismo" y el único camino para la paz es "compartir el desarrollo" por lo que es necesario que si no se desea una guerra global "la justicia debe ser global".

En este sentido, Lula pidió la eliminación de barreras comerciales que mantienen a los países pobres al margen del desarrollo, asegurando que se trata de un "deber moral de la comunidad internacional" perseguir este objetivo. "No hay una forma más efectiva para unir a los países y mantener la paz que proteger los derechos humanos, promover el desarrollo sostenido y formular soluciones para los problemas comunes", afirmó.

Lula también criticó la reciente actuación de la ONU en el reciente conflicto de Líbano, asegurando que "ha puesto en entredicho la autoridad" de la organización. Para el presidente brasileño una Conferencia patrocinada por la ONU con la participación de países distintos a las actuales potencias, "que no han hallado ninguna solución", podría aportar nuevas ideas para solventar la crisis que vive Oriente Próximo.

El presidente brasileño también se refirió a la reforma del Consejo de Seguridad y recordó la necesidad de abrir a los países en desarrollo nuevos asientos permanentes que haría al organismo "más democrático, legítimo y representantivo".

Lula concluyó asegurando que la ONU debe aplicarse a si misma la democracia que promulga fuera y "demostrar que hay una efectiva representación en los organismos políticos de Naciones Unidas".