NUEVA YORK, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Colombia, Álvaro Uribe, manifestó ayer durante su intervención en la Asamblea de Naciones Unidas, que su país continúa luchando para que cada ciudadano pueda vivir en confianza y con seguridad.
Uribe aseguró que en un país como Colombia, la democracia descansa en la transparencia, que a su vez depende del respeto a los Derechos Humanos. El Gobierno intenta constantemente mantener el equilibrio en ese respecto. Asimismo aseguró que se ha puesto en marcha un programa sobre el respeto a los Derechos Humanos destinado a los soldados del país.
Uribe aseguró en su discurso que los crímenes en Colombia son cada vez menores. Tan sólo el 36 por ciento de los homicidios que han tenido lugar este año ha sido de trabajadores y profesores miembros de sindicatos, y por el momento ningún periodista ha sido asesinado.
Mientras las organizaciones terroristas han tenido como objetivo principal a los trabajadores durante los últimos años, el desmantelamiento paramilitar ha conseguido reducir de manera significante su número. Asimismo, el mandatario colombiano recalcó que el país está esforzándose al máximo para acabar con las organizaciones terroristas, sobre todo con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Las víctimas han dejado de lado su miedo y comienzan a reivindicar sus derechos. El año pasado Uribe reconoció durante su discurso en la Asamblea, que su país no había podido liberar a la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt. Este año no se da el caso, ya que tras siete años bajo el cautiverio de las FARC, Betancourt fue puesta en libertad gracias a la 'Operación jaque', lanzada por el Gobierno colombiano.
CONTRA EL NARCOTRÁFICO
En su participación en el debate de la Asamblea General de la ONU, Uribe afirmó que el narcotráfico es enemigo del medio ambiente y sirve de combustible al terrorismo. "Colombia aún sufre violencia porque tiene drogas ilícitas", apuntó.
Asimismo aseveró que la responsabilidad compartida en la lucha antinarcóticos no tiene el propósito de asignar responsabilidades exclusivas a los países consumidores, ya que en las naciones productoras también hay consumo. "Nosotros hablamos de responsabilidad compartida para que el mundo ataque por igual la producción, el tráfico, el consumo, el lavado de activos, los precursores químicos. Nuestro Gobierno solicita la sanción al consumo, en nuestro país y en la comunidad internacional", recalcó el presidente colombiano.
Uribe manifestó que pese a los esfuerzos y logros de su país en la lucha contra las drogas, no hay una reducción importante de áreas de siembras y el consumo aumenta, y advirtió de que quien compra una dosis personal de drogas estimula a un niño a que sea distribuidor y más tarde criminal, además de que ayuda a explotar carros bomba en Colombia y a destruir la selva amazónica.