Actualizado 06/03/2015 12:48

¿Qué países en Latinoamérica exigen visados a los estadounidenses?

Visado
Foto: JASON REED / REUTERS

MADRID, 6 Mar. (Notimérica) -

   El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha anunciado esta semana que todos los estadounidenses que quieran ingresar al país a partir del martes que viene deberán solicitar un visado de turistas, según resolución del Gobierno venezolano en represalia a sanciones de Washington contra sus funcionarios. Sin embargo, no es el único país de América Latina que exige esta medida a los estadounidenses.

   El Programa de Exención de Visas (VWP, por sus siglas en inglés) permite a ciudadanos de ciertos países viajar a Estados Unidos por motivos de turismo o negocios y por un periodo inferior a 90 días sin necesidad de obtener un visado. Sin embargo, el único país latinoamericano que está incluido en el VWP es Chile.

   Por eso, tres países latinoamericanos exigen la conocida como 'visa de reciprocidad' a los ciudadanos estadounidenses, al considerar que si Estados Unidos no permite a ningún latinoamericano (salvo a los chilenos) entrar en el país sin visado, tampoco ningún estadounidense debería poder hacerlo en la región. Por eso, Bolivia, Brasil y Paraguay exigen 'visa de reciprocidad' a los ciudadanos estadounidenses.

   Argentina exige la 'tasa de reciprocidad', que no es un visado, sino una tasa de solicitud de ingreso por una cantidad equivalente a la que abonan los argentinos por la solicitud de visa en Estados Unidos, Canadá y Australia. Un estadounidense que quiera ingresar en Argentina tendrá que pagar 160 dólares.

VENEZUELA SE SUMA A LA SOLICITUD DE VISA

   Desde esta semana, Venezuela se ha sumado a los países latinoamericanos que exigen el visado a los estadounidenses. Maduro ha tomado, además, otras medidas que han puesto en la cuerda floja la ya débil relación entre Venezuela y Estados Unidos.

   El país socialista ha dado quince días a la embajada de Estados Unidos en Caracas para reducir su personal diplomática de 100 (número actual) a 17, ya que según el Gobierno venezolano, es el mismo número de funcionarios de la embajada venezolana en Washington.

   Además, los funcionarios que permanezcan en el país sudamericano deberán informar a las autoridades de todas sus reuniones. Así, con la resolución publicada este martes en la Gaceta Oficial se excluye a Estados Unidos de una lista de 65 países "beneficiados de supresión de visas no migrantes (turistas) en pasaportes ordinarios".

   Por su parte, Estados Unidos ha respondido a través de canales diplomáticos a la demanda de Venezuela de reducir la cantidad de personal en su embajada de Caracas: "Vamos a responder al Gobierno de Venezuela a través de los canales diplomáticos después de la debida consideración de su solicitud", según ha explicado la portavoz del Departamento de Estado, Marie Harf, poniendo en tela de juicio la afirmación de Maduro de que hay 17 empleados venezolanos en la embajada en Washington, según ha publicado Reuters.

   A través de una segunda resolución, Venezuela prohibió permanentemente la entrada a un grupo de estadounidenses por considerar que "han cometido actos terroristas y graves violaciones a los derechos humanos". Entre los que destacan el ex presidente George W. Bush, el senador republicano Marco Rubio, la congresista Ileana Ros-Lehtinen y el ex vicepresidente Dick Cheney, entre otros.

   Esta es la respuesta de Maduro a la decisión del presidente estadounidense, Barack Obama, que a finales del año pasado firmó una ley que permite imponer sanciones a funcionarios venezolanos acusados de haber violado los derechos de manifestantes involucrados en una ola de protestas que sacudió al país sudamericano en 2014. Entre las sanciones se incluía la prohibición de entrada a Estados Unidos de algunos venezolanos.

   Todo esto se produce en un momento crítico para el Gobierno de Maduro, que atraviesa una crisis económica alentada por la caída del precio del petróleo y el desabastecimiento de productos básicos, lo que ha derivado en protestas y revueltas sociales contra el ejecutivo. Además, Maduro ha denunciado la existencia de una conspiración, de la que participaría Estados Unidos, para derrocar el régimen socialista a través de un golpe de Estado.