ISLAMABAD, 16 Sep. (DPA/EP) -
La Policía de Pakistán ha presentado cargos de traición contra tres periodistas conocidos por sus críticas al todopoderoso Ejército del país, en lo que los activistas de Derechos Humanos han definido como un flagrante ataque contra la libertad de expresión.
Bilal Faruqi, editor del diario 'The Express Tribune', fue detenido brevemente en la ciudad de Karachi (sur), pero fue puesto en libertad tras un aluvión de críticas en las redes sociales, según sus colegas. Los cargos contra Faruqi no han sido retirados y tendrá que enfrentarse a un tribunal, según el oficial de Policía Imtiaz Ali.
Por otra parte, un tribunal en Islamabad, la capital, ha aprobado este miércoles una fianza temporal para Asad Toor, un productor de la cadena SAMAA, hasta la próxima semana. El tercer periodista, Absar Alam, se enfrenta a su arresto inminente después de que se registrara una causa en su contra el provincia de Punyab (centro).
Los cargos se conocen días después de que otro periodista recibiera amenazas de muerte por un artículo sobre cómo la familia de un general retirado había forjado un emporio empresarial de 100 millones de dólares en Estados Unidos.
Los sindicatos de periodistas han condenado estos pasos, que consideran que se enmarcan en la campaña de censura gestionada por el Ejército que comenzó cuando llegó al poder el primer ministro, Imran Jan, en 2018.
"Es un descarado ataque contra la libertad de expresión", ha denunciado Haris Jalique, secretario general de la Comisión de Derechos Humanos de Pakistán. Los ataques, la intimidación y los abusos en las redes contra periodistas críticos con el Ejército son frecuentes en Pakistán, país en el que 61 profesionales de los medios han sido asesinados desde 1922.