ÁMSTERDAM, 10 Oct. (EUROPA PRESS) -
La compañía holandesa Royal Philips espera que sus ventas registren en el tercer trimestre del año un crecimiento del 6% en datos comparables, hasta 4.700 millones de euros, aunque ha advertido de que el impacto adverso de los aranceles provocó una caída de sus márgenes en el negocio de Atención Conectada ('Connected Care').
Por su parte, el beneficio neto de operaciones continuadas se situará en unos 210 millones de euros en el tercer trimestre, incluyendo un impacto negativo de 78 millones relacionado con amortizaciones en el área de Atención Conectada.
De este modo, dado el desempeño por debajo de lo esperado de este negocio y los significativos vientos en contra, la compañía espera que la mejora de su margen de Ebita ajustado para 2019 será de entre 10 y 20 puntos básicos, después de tres ejercicios consecutivos en los que había logrado una mejora de 100 puntos básicos. De hecho, la multinacional confía en volver a registrar una mejora similar en 2020, con un crecimiento de sus ventas comparables de entre el 4% y el 6%.
"Seguimos viendo un buen impulso de crecimiento en nuestros negocios", declaró Frans van Houten, consejero delegado de Royal Philips. "Sin embargo, aunque estoy satisfecho con las mejoras en el rendimiento operativo en los negocios de Diagnóstico y Tratamiento y Salud Personal, es decepcionante que los márgenes hayan disminuido en el negocio de Atención Conectada", añadió.
En este sentido, el máximo ejecutivo de Philips explicó que esto se debió al aumento de los vientos en contra por los aranceles y al retraso en el efecto de las medidas de alivio implementadas, así como a una cobertura insuficiente de las fábricas ante la reducción de los niveles de producción para reducir el inventario y al impacto adverso del mix de productos.
"Impulsaremos más acciones de alivio para acelerar la mejora en estos negocios", adelantó Van Houten.