Actualizado 28/07/2006 22:55

Perú.- Alan García anuncia una estricta política de austeridad durante su mandato y la refundación del Estado

El mandatario establecerá salarios "más cercanos a la realidad del pueblo" para los funcionarios y reducirá los gastos de las embajadas


LIMA, 28 Jul. (EUROPA PRESS) -

Alan García asumió hoy la Presidencia de Perú, durante la que anunció que su mandato estará protagonizado por la austeridad, la generación de empleo y una refundación del sistema político del país, el cual, en su opinión, "no está tan bien como dicen algunos".

En su discurso de investidura en el Congreso, el nuevo mandatario subrayó que la situación actual de la nación sudamericana no es la misma que en la que se encontraba durante su primer gobierno, que se prolongó desde 1985 a 1990, que dejó al país en medio de la ruina económica y una guerra interna.

En este sentido, aseguró que su partido, el APRA, ha aprendido de la experiencia y que uno de los objetivos más importantes será "servir a los más necesitados". Además, destacó que su primera meta como presidente será lograr que Perú vuelva a ser un estado líder en Sudamérica, según informa el diario peruano 'El Comercio'.

Alan García juró como nuevo presidente de Perú, el número 75 en 185 años de historia de esta República, en su retorno al poder dos décadas después con el desafío de desterrar la mala imagen que dejó su primer gobierno y bajo la urgencia de hallar soluciones en un país donde la mitad de su población vive en la pobreza.

ASISTIÓ EL PRÍNCIPE FELIPE

Al comenzar su legislatura de cinco años, García, de 57 años, juró poco antes del mediodía (seis de la tarde, hora española) ante la presidenta del Congreso, Mercedes Cabanillas, y en presencia de nueve presidentes latinoamericanos; el príncipe Felipe en representación de España, y delegaciones de Estados Unidos, Europa y Asia.

En lo que respecta a su política contra la pobreza, García explicó que aplicará una estricta política de austeridad, para lo cual adelantó que presentará un Decreto Supremo que establece nuevas remuneraciones "más justas y cercanas a la realidad del pueblo" para todos los fuencionarios públicos elegidos.

Así, precisó que el jefe de Estado ya no percibirá una remuneración de 42.000 soles (10.160 euros), sino que a partir de ahora pasará a ganar 16.000 (3.870 euros) y el ingreso parlamentario por todo concepto será reducido a 15.600 nuevos soles (3.770). Para el nuevo presidente, es necesario refundar el sistema político haciendo que las autoridades elegidas por el pueblo tengan "salarios justos".

REDUCIR LOS GASTOS DEL PALACIO DE GOBIERNO

Su política de austeridad --agregó-- comenzará por el Palacio de Gobierno, donde se reducirán a la mitad los gastos, respecto a lo que criticó la gestión del mandatario saliente, Alejandro Toledo, quien, según resaltó García, gastó 15 millones de soles sólo en la compra de muebles y alfombras, según informa la emisora local 'RPP'.

Por otro lado, anunció que se reducirán las tasas consulares, reduciendo el número de diplomáticos a la mitad, cerrando seis embajadas y reduciendo el sueldo de los embajadores a la mitad y de sus gastos de representación en un 25 por ciento.

García señaló que los 20 millones de nuevos soles que se ahorren por estos conceptos serán destinados al revestimiento del canal de Tinajones, situado en el departamento de Lambayeque, para ahorrar el agua que se pierde. Asimismo, aseguró que su Gobierno favorecerá el acceso a programas de vivienda para los peruanos que viven en el exterior.

El nuevo mandatario ratificó su compromiso de luchar por los 13 millones de "olvidados" que "no tienen nada", subrayando que "ellos, que son los últimos, serán los primeros", y manifestó que trabajará "por todo y por todos sin exclusión partidaria" con el fin de fortalecer la fe de los ciudadanos en la libertad y la democracia.

En lo que respecta a su objetivo de convertir a Perú en líder de Sudamérica, García destacó que pretende que el país compita con las naciones hermanas. "Declaro que mi ambición es superar el desarrollo económico y social de los vecinos sudamericanos", concluyó.