Publicado 04/10/2019 21:10

El presidente interino de Túnez dice que el encarcelamiento de Karoui puede dañar la "credibilidad" de las elecciones"

Túnez.- El presidente interino dice que el encarcelamiento de Karoui puede dañar
Túnez.- El presidente interino dice que el encarcelamiento de Karoui puede dañar - -/Tunisian Presidency/dpa

MADRID, 4 Oct. (EUROPA PRESS) -

El presidente interino de Túnez, Mohamed Enaceur, ha advertido este viernes de que el encarcelamiento de Nabil Karoui, uno de los dos candidatos en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, podría dañar la "credibilidad" del proceso.

El Tribunal de Apelaciones de Túnez falló el martes contra la liberación del magnate, detenido por presunta corrupción, a menos de dos semanas de la celebración de la votación, prevista para el 13 de octubre.

"Que no pueda beneficiarse de su libertad como candidato a las presidenciales para seguir realizando su campaña es motivo de preocupación, dudas y críticas (...) en el plano nacional e internacional", ha indicado Ennaceur, en un discurso a la nación.

Así, ha apostado por intentar lograr "un equilibrio entre el respeto al Poder Judicial, el principio de separación de poderes y la garantía de igualdad de oportunidades entre los candidatos", según ha recogido la agencia estatal tunecina de noticias, TAP.

En este sentido, ha aplaudido los esfuerzos del presidente de la comisión electoral de Túnez, Nabil Bafún, por lograr "las condiciones necesarias que permitan al candidato Nabil Karoui llevar a cabo su campaña electoral en condiciones normales".

Bafún apostó el jueves por autorizar al magnate a participar en debates y dar entrevistas de cara a la segunda vuelta de las presidenciales, al tiempo que descartó aplazar la votación.

De esta forma, sostuvo que la Alta Autoridad Independiente para las Elecciones (ISIE) "debería ayuda a que Karoui se exprese ante periodistas y votantes y que participe en debates desde prisión".

Karoui, detenido en agosto por supuesto blanqueo de dinero, se enfrentará en la segunda vuelta al independiente Kais Saied, quien se impuso en la primera ronda con el 18,4 por ciento de los votos. El magnate y líder del partido Corazón de Túnez obtuvo el 15,58 por ciento de las papeletas.

Los partidarios de Karoui han denunciado un intento de silenciarle por sus críticas al Gobierno, mientras que sus detractores aseguran que el magnate ha usado de forma indebida su cadena de televisión, Nessma TV, y su organización caritativa para su propia ventaja política.

"DIFICULTADES" EN TÚNEZ

Por otra parte, Ennaceur ha hecho un llamamiento a la población a una alta participación tanto en la segunda vuelta de las presidenciales como en las elecciones parlamentarias, que se celebrarán este domingo.

"Es nuestro deber seguir el camino de la democracia y paliar las dificultades a las que hace frente el país", ha manifestado, antes de pedir a partidos políticos y medios de comunicación que "eviten el discurso del odio".

"El Estado está en marcha", ha dicho Ennaceur, quien ha invitado a los candidatos a "identificar nuevas oportunidades" de cara a una "edificación común" en el país africano.

Las parlamentarias se celebrarán en un contexto de desafección por parte de la población con los partidos tradicionales, algo que se vio reflejado en la primera vuelta de las presidenciales.

En dicha votación, los candidatos de los principales partidos --incluido el primer ministro, Yusef Chahed-- recibieron un duro varapalo y, de hecho, Saied y Karoui son figuras consideradas 'outsiders' en el escenario político tunecino.

POSIBLE FRAGMENTACIÓN PARLAMENTARIA

Ante esta situación, dos de los partidos que figuran como favoritos de cara a las parlamentarias, el islamista Ennahda y Corazón de Túnez --la formación de Karoui--, ya han anunciado que no pactarán entre ellos para formar un Ejecutivo.

De hecho, Ennahda anunció tras la primera vuelta --de la que quedó eliminado su candidato, Mustafá Mourou-- su apoyo a Saied de cara a la segunda ronda, presentando ambas opciones como la vía "revolucionaria" frente a la "corrupción" que, según el partido, encarna Karoui.

El partido islamista, cuyo líder, Rached Ghannuchi, se presenta por primera vez a las elecciones, ha sido hasta ahora uno de los principales actores en la política tunecina desde la revolución de 2011 contra Zine el Abidine ben Alí.

Por su parte, el partido de Karoui ha hecho frente a la situación de encarcelamiento de su líder, así como a las recientes informaciones sobre un posible pago de un millón de dólares a una consultora canadiense, lo que podría violar las normas de financiación electoral.

La campaña de la formación está siendo liderada por su esposa, Salua Samui, quien ha realizado numerosos actos en el país, con un foco especial en la pobreza y las desigualdades sociales.

La Constitución de 2014 contempla que el primer ministro es uno de los miembros del partido con más representación parlamentaria y, desde 2011, ha habido diversas coaliciones entre partidos seculares e islamistas.

En caso de que en dos meses no haya un acuerdo de coalición que garantice al bloque los 109 parlamentarios necesarios para tener la mayoría absoluta, el presidente puede dar el mandato a otro partido para intentar alcanzar un pacto. En caso de que no fructifique, se convocan nuevas elecciones.