Actualizado 24/06/2009 22:03

PREVIA-Elección argentina desafía poder de matrimonio Kirchner

Por Guido Nejamkis

BUENOS AIRES (Reuters/EP) - Argentina votará para renovar legisladores el domingo, en una elección que pondrá en juego la mayoría oficialista en el Congreso y definirá los políticos favoritos para suceder al debilitado Gobierno de la presidenta Cristina Fernández en el 2011.

Néstor Kirchner, esposo de Fernández y visto como el poder real en el Gobierno, planteó la votación como un plebiscito sobre su gestión (2003-2007) y la de su sucesora, por lo que su desempeño como candidato a diputado en la central provincia de Buenos Aires tiene en vilo a oficialismo y oposición.

El Partido Justicialista (peronista), que Kirchner preside, podría perder terreno en el Congreso, según sondeos, lo que colocaría a Fernández y a su cónyuge en la situación de gobernar sin mayoría legislativa y ante un difícil escenario económico.

"Los Kirchner están frente a una prueba difícil que definirá su habilidad para gobernar", dijo el analista político y encuestador Roberto Bacman.

Ante esos pronósticos, la mayor apuesta oficialista es ganar la provincia de Buenos Aires, donde Kirchner encabeza una lista de candidatos a diputados que también incluye al gobernador Daniel Scioli y al jefe de Gabinete del Gobierno, Sergio Massa.

La imagen positiva de Fernández en la principal provincia del país ha caído a un escaso 30,9 por ciento debido a una alta inflación no reconocida oficialmente que mina el poder de compra de la población y por una creciente percepción de inseguridad urbana, según un sondeo de la consultora Graciela Romer.

La mandataria sufrió el año pasado una fuerte caída en su popularidad tras un prolongado conflicto con el poderoso sector agrícola, puntal de la economía argentina.

"Está claro que la estrella del kirchnerismo viene perdiendo brillo", dijo Romer a Reuters.

Muchos argentinos están cansados, además, del ríspido estilo de Gobierno que practicó Kirchner y continuó su cónyuge, junto a una política económica de fuerte intervención estatal que coincidió con una fuerte expansión de la economía desde el 2003 hasta el año pasado, cuando comenzó a desacelerarse.

PROVINCIA DE BUENOS AIRES

Recuperar o mantener el fulgor declinante depende en gran parte del desempeño de Kirchner en la provincia de Buenos Aires, donde vive el 38 por ciento de la población argentina.

La mayoría de las encuestas otorga una leve ventaja a Kirchner sobre su principal rival en Buenos Aires, Francisco de Narváez, un empresario de corta trayectoria política que lidera una facción peronista disidente y quien apuesta a un triunfo con el voto decidido a última hora.

Una eventual victoria de De Narváez en el distrito más poblado del país asestaría un golpe a Kirchner y, según Romer, conformaría un abierto escenario de disputa por el poder en el gobernante peronismo con miras a mantener la presidencia en el 2011.

"Kirchner puede ganar o perder por una diferencia acotada por lo que las posibilidades de reforzar su liderazgo son relativas", apuntó Romer.

En esa carrera, además de Kirchner y su esposa, que tiene derecho legal a una reelección consecutiva, están anotados el senador por Santa Fe Carlos Reutemann y el gobernador de Buenos Aires, Daniel Scioli, ambos peronistas, entre otros.

El movimiento fundado por Juan Perón, tres veces presidente de Argentina, ha permanecido apenas dos años fuera del Gobierno central desde 1989.

En la elección argentina de medio término se renovarán 129 bancas en la Cámara de Diputados, de un total de 257, y 24 del Senado, de un total de 72. El sufragio es obligatorio y 27,8 millones de personas están habilitadas para votar.

Sondeos y proyecciones indican que en la Cámara baja las bancas del oficialismo y sus aliados disminuirían a entre 110 y 115 desde las actuales 135, mientras que en el Senado pasarían a 37 desde 41.

(Con reporte adicional de Kevin Gray y Karina Grazina, Editado por Gabriela Donoso)