Publicado 17/03/2020 21:22

R.Centroafricana.- Guterres condena "firmemente" los dos últimos ataques contra 'cascos azules' de la MINUSCA en RCA

R.Centroafricana.- Guterres condena "firmemente" los dos últimos ataques contra
R.Centroafricana.- Guterres condena "firmemente" los dos últimos ataques contra - Luiz Rampelotto/ZUMA Wire/dpa

MADRID, 17 Mar. (EUROPA PRESS) -

El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, ha condenado "firmemente" los dos ataques ejecutados el domingo contra la Misión Unidimensional Integrada de Naciones Unidas para la Estabilización en República Centroafricana (MINUSCA), que se saldaron con un 'casco azul' muerto y otro herido.

Guterres ha recordado que "los ataques contra tropas de pacificación de la ONU podrían equivaler a un crimen de guerra, según el Derecho Internacional", tal y como ha indicado su portavoz, Stéphane Dujarric.

Asimismo, ha pedido a las autoridades centroafricanas que "no escatimen esfuerzos a la hora de identificar a los responsables de estos ataques para que puedan ser llevados rápidamente ante la Justicia".

El secretario general de la ONU ha reafirmado además "la determinación de la MINUSCA a seguir aplicando su mandato, en particular en lo relativo a proteger a los civiles y ayudar a hacer avanzar el proceso político en RCA".

Por último, ha trasladado sus "profundas condolencias" a la familia del 'casco azul' burundés fallecido y ha deseado una rápida recuperación al herido.

El primer ataque fue ejecutado en Grimari (sur), donde murió el 'casco azul' burundés, mientras que horas después hubo una emboscada cerca de Ndelé (centro-norte) en la que resultó herido un 'casco azul' paquistaní.

El ataque en Grimari fue achacado a milicia 'anti balaka' liderada por Dimitri Ayoloma contra las residencias del subprefecto y el alcalde de Grimari, mientras que detrás del segundo incidente estuvo el Popular para el Renacimiento de Centroáfrica (FPRC).

El país africano se vio inmerso en un conflicto que comenzó a finales de 2013 y que enfrentó al Gobierno, a los antiguos rebeldes Séléka --principalmente musulmanes-- y las milicias 'antibalaka' --predominantemente cristianas--.

El presidente del país, Faustin-Archange Touadera, firmó el 6 de febrero de 2019 un acuerdo de paz con catorce grupos armados que prevé el cese inmediato de las hostilidades, un proceso de desarme y reinserción de los milicianos, además de un Gobierno de unidad ya formado.