MADRID, 16 Mar. (EUROPA PRESS) -
Al menos un 'casco azul' de la Misión Unidimensional Integrada de Naciones Unidas para la Estabilización en República Centroafricana (MINUSCA) resultó herido en una emboscada tendida contra una patrulla cerca de Ndelé (centro-norte), una jornada en la que también murió un integrante de la misión en Grimari (sur).
La MINUSCA ha destacado en un comunicado que en el enfrentamiento murieron dos "asaltantes" no identificados, al tiempo que ha agregado que mantiene sus patrullas en Ndelé y sus alrededores, en coordinación con la Gendarmería.
Así, ha detallado que "hombres armados fuertemente armados" abrieron fuego contra el convoy, antes de resaltar que los 'cascos azules' "respondieron", en línea con la resolución 2499 aprobada por Naciones Unidas.
"La MINUSCA permanece en alerta y ha intensificado las patrullas en la zona con gendarmes centroafricanos", ha dicho, al tiempo que ha recordado a los grupos armados activos en esta región, principalmente facciones del Frente Popular para el Renacimiento de Centroáfrica (FPRC), sus compromisos como firmantes del acuerdo de paz.
En este sentido, ha pedido a la cúpula del grupo armado que "controle a todos sus elementos, bajo pena de ser parte como responsables jerárquicos, de violaciones del Derecho Humanitario".
Por último, ha recordado que la MINUSCA cuenta con mandato para proteger a los civiles y que el acuerdo de paz garantiza la libre circulación de las fuerzas de la ONU y las fuerzas de seguridad en todo el territorio.
Horas antes, la MINUSCA había confirmado la muerte de un 'casco azul' burundés tras un ataque de una milicia 'anti balaka' liderada por Dimitri Ayoloma contra las residencias del subprefecto y el alcalde de Grimari.
"Este ataque a la ciudad de Grimari y al personal de mantenimiento de la paz es inaceptable y constituye un delito grave bajo la jurisdicción de los tribunales nacionales e internacionales", denunció el jefe de la MINUSCA, Mankeur Ndiaye.
Ndiaye afirmó que Ayoloma y el resto de "perpetradores" y "cómplices del ataque" tendrán que hacer frente a los tribunales debido a sus actos, los cuales, recordó, pueden ser considerados "crímenes de guerra".
Se trata de la segunda muerte de un miembro de la MINUSCA durante el mes de marzo, después de que uno de sus trabajadores fuera "acribillado a balazos" en la ciudad de Ndélé.
El país africano se vio inmerso en un conflicto que comenzó a finales de 2013 y que enfrentó al Gobierno, a los antiguos rebeldes Séléka --principalmente musulmanes-- y las milicias 'antibalaka' --predominantemente cristianas--.
El presidente del país, Faustin-Archange Touadera, firmó el 6 de febrero de 2019 un acuerdo de paz con catorce grupos armados que prevé el cese inmediato de las hostilidades, un proceso de desarme y reinserción de los milicianos, además de un Gobierno de unidad ya formado.