Publicado 25/09/2019 19:05

R.Centroafricana.- El presidente de RCA pide el fin del embargo de armas para poder combatir a los rebeldes

MADRID, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -

El presidente de República Centroafricana (RCA), Faustin Archange Touaderá, ha reclamado este miércoles el fin del embargo de armas impuesto contra el país para poder hacer frente a los grupos rebeldes que continúan operando pese a la firma del acuerdo de paz.

En su intervención ante la 74 Asamblea General de Naciones Unidas, Touaderá ha destacado que "la situación en el país sigue siendo frágil pese a los avances" obtenidos a raíz de la firma del acuerdo con catorce grupos armados en febrero de 2019.

"Los grupos armados (no firmantes) siguen aprovisionándose de materiales de guerra por vías ilícitas y son culpables de violaciones masivas y repetidas del Derecho Humanitario", ha denunciado, antes de incidir que el embargo impide al Estado obtener las armas necesarias para combatirlos.

Así, ha lamentado que "las fuerzas legales y legítimas de RCA son las únicas golpeadas por el embargo, privando al Estado de los medios para cumplir su misión de proteger a los ciudadanos y el territorio".

"Reitero solemnemente la demanda del Gobierno y la aspiración legítima del pueblo centroafricano en favor de una retirada total de este embargo para permitir al Estado extender su autoridad sobre la totalidad del territorio nacional y proteger a la población civil", ha incidido.

Toauderá ha insistido además que la firma del acuerdo ha permitido al país "lograr progresos modestos, pero seguros" y ha aplaudido la "solidaridad internacional" para "abrir una nueva página en su historia" a raíz del citado pacto de paz.

El embargo fue impuesto al país en 2013, después de que los rebeldes de Séléka, una alianza integrada principalmente por musulmanes, se hicieran con el poder desencadenando una guerra civil con los grupos de autodefensa, popularmente conocidos como 'antibalaka' e integrados mayoritariamente por cristianos.

El histórico acuerdo de paz firmado el 6 de febrero entre Touadéra y catorce grupos armados prevé el cese inmediato de las hostilidades, un proceso de desarme y reinserción de los milicianos y la creación de un Gobierno inclusivo, cuya composición fue anunciada en marzo.