Publicado 21/08/2020 13:12

RDCongo.- El brote de ébola en el oeste de República Democrática del Congo alcanza el centenar de casos

RDCongo.- El brote de ébola en el oeste de República Democrática del Congo alcan
RDCongo.- El brote de ébola en el oeste de República Democrática del Congo alcan - SALLY HAYDEN / ZUMA PRESS / CONTACTOPHOTO

MADRID, 21 Ago. (EUROPA PRESS) -

El brote de ébola en la zona occidental de República Democrática del Congo (RDC), declarado a principios de junio, ha alcanzado ya el centenar de casos, de los cuales al menos 43 corresponden a personas que han fallecido, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).

El epicentro de este brote, el undécimo registrado en el país africano, tiene por escenario la provincia de Equateur. Se detectó inicialmente en la capital regional, Mbandaka, pero ya se ha extendido a varias áreas sanitarias de la provincia.

La directora de la OMS para África, Matshidiso Moeti, ha advertido de que, "con cien casos en menos de cien días, el brote de la provincia de Equateur está evolucionando de una forma preocupante". El dato de enfermos prácticamente se ha duplicado en poco más de cinco semanas.

Entre los aspectos que preocupan figuran los retos logísticos del despliegue de emergencias, ya que las comunidades afectadas se reparten por una amplia zona con gran presencia de bosques. El área afectada englobaría ya unos 300 kilómetros de norte a sur y de este a oeste y puede llevar días llegar a ciertas poblaciones.

Estas circunstancias complican la asistencia y, por extensión, elevan los costes de la misma. "Sin un apoyo adicional de equipos sobre el terreno, será más difícil contener el virus", ha advertido Moeti, al recordar que son necesarios más fondos para responder de una forma adecuada a la emergencia.

En este sentido, la responsable de la OMS ha subrayado que "la COVID-19 no es la única emergencia que requiere de un apoyo firme". "Como sabemos por nuestra historia reciente, ignorar el ébola nos pone en peligro", ha remachado.

República Democrática del Congo declaró en junio el fin del brote de éboa más mortífero de su historia, que se cobró la vida de 2.280 personas. Fue el segundo más grave a nivel mundial, solo por detrás del que afectó entre 2014 y 2016 a África Occidental y que dejó unos 11.300 fallecidos.