Actualizado 13/12/2016 17:36

Los resultados del referéndum en Bolivia confirman el 'no' a la reelección de Morales

Evo Morales vota en las elecciones regionales de Bolivia
PRESIDENCIA.GOB.BO


LA PAZ, 24 Feb. (EUROPA PRESS) -

El 'no' en el referéndum celebrado en Bolivia ha obtenido el 51,3 por ciento de los votos, con el 99,72 por ciento del escrutinio, por lo que se pone freno a la reforma constitucional propuesta por el Gobierno y que abriría la puerta a una posible reelección del presidente, Evo Morales.

El 48,7 por ciento de los electores han votado por el 'sí', pero no es suficiente y, en base a estos resultados, Morales ya no podrá buscar un cuarto mandato. En la última actualización del Tribunal Supremo Electoral (TSE), que se antoja definitiva, ya había 30.282 actas computadas.

El líder de centroizquierda ocupa la Presidencia de Bolivia desde el año 2006 y pretendía reformar la Constitución para poder presentarse de nuevo a las elecciones de 2019 como candidato para gobernar el país sudamericano del 2020 al 2025.

La presidenta del TSE, Katia Uriona, ha comparecido ante la prensa y ha detallado que el 'no' obtuvo 2.671.329 votos y el 'sí' 2.532.882 votos, lo que supone una diferencia de 138.351 votos.

Uriona también ha indicado que en lo que respecta a la votación en el exterior, al 99,39 por ciento del cómputo de actas, el 'sí' obtuvo un 51,37 por ciento y el 'no' 48,63 por ciento.

Según ha informado el diario boliviano 'La Razón', los datos finales serán presentados tras la votación del próximo 6 de marzo en 24 mesas de la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, donde se produjeron quemas de urnas y papeletas, y otra mesa de La Paz, cuya acta fue recurrida.

DENUNCIA DE "INTENTO DE FRAUDE"

Horas antes, el vicepresidente de Bolivia, Álvaro García Linera, ha denunciado un "matonaje electoral" y un "intento de fraude" por parte de la oposición durante el referéndum del pasado domingo, en el que la ciudadanía estaba llamada a decidir el futuro político del jefe de Estado.

Morales ha evitado reconocer la derrota a la espera de que concluya el escrutinio del voto rural y, este martes, García Linera ha denunciado la "presión" ejercida por la oposición en zonas teóricamente afines al oficialismo. En concreto, se ha referido al "voto campesino" y al "voto indígena".

"Es una movilización de presión que rompe las reglas electorales y encubre un fraude electoral para que no se contabilice el voto", ha asegurado el vicepresidente, que en rueda de prensa ha hablado de "matonaje electoral" e "intento de fraude" al aludir a las movilizaciones sociales, según los medios locales.

"La garantía de la transparencia es absoluta pero, en un acto de desesperación política la derecha, va a intentar anular este voto rural campesino e indígena", ha advertido.