Por John Parry y Alister Bull
NUEVA YORK/WASHINGTON (Reuters/EP) - La confianza del consumidor estadounidense empeoró a comienzos de julio por las persistentes preocupaciones sobre el empleo, mostró el viernes un sondeo, que ofreció pocas esperanzas de que el gasto ayude a la menguante reactivación económica.
Otro reporte mostró que la demanda interna de bienes extranjeros colapsó en mayo, reflejando un consumo persistentemente flojo, que ayudó a contraer el déficit comercial mensual al mínimo desde 1999.
La confianza del consumidor cayó a inicios de julio a su mínimo desde marzo, cuando la percepción sobre el sector financiero y la economía estaba en retroceso, mostró el Sondeo de Reuters/Universidad de Michigan.
Las crecientes preocupaciones de los consumidores sobre una desaceleración económica larga, la seguridad laboral y la erosión de la riqueza fueron los principales factores que deprimieron la confianza, señaló el sondeo. También había temores por la reciente baja de la bolsa, según analistas.
El dato "subraya el actual pesimismo que enfrenta el consumidor de Estados Unidos y aplaza aun más la perspectiva de una recuperación a corto plazo. Eso pesará fuertemente sobre la percepción sobre el riesgo", dijo Brian Dolan, estratega cambiario de Forex.com en Bedminster, Nueva Jersey.
"Los consumidores concluyeron que el declive económico duraría más tiempo y que sus finanzas personales no se recuperarían tan rápido como habían previsto anteriormente", dijo en un comunicado el Sondeo del Consumidor de Reuters/Universidad de Michigan.
El índice preliminar para julio de la confianza en el sondeo bajó a una lectura de 64,6 contra la medición final de junio a 70,8. Los recientes aumentos de ingresos fueron reportados por el menor número de consumidores en los más de 50 años de historia del sondeo, según el comunicado.
El componente de las expectativas de la encuesta está "influenciado razonablemente por los movimientos de los precios de las acciones. Tras un buen trimestre, ahora las acciones están en baja en julio", dijo John Ryding, economista de RDQ Economics en Nueva York.
La Bolsa de Nueva York caía el viernes al mediodía, mientras que los precios de los bonos del Tesoro de Estados Unidos aumentaban tras las últimas señales de debilidad económica.
El reciente descenso de las acciones ha ejercido presión sobre los presupuestos familiares. El índice Standard & Poor's 500 ha caído un 4 por ciento en lo que va de julio.
"Los consumidores reportaron un cambio negativo mayor en su panorama de largo plazo para la economía. La mayoría de los consumidores creía que el desempleo generalizado persistiría en los próximos cinco años", dijo el sondeo.
Pese al panorama negativo, Ryding dijo que no cree que "se descarrile la historia del final de la recesión". "Pensamos que la recesión terminó en el segundo trimestre, pero hay algunos interrogantes por el lado de los consumidores y tendremos que ver cómo evoluciona eso", agregó.
DESPLOME DE DEMANDA BIENES IMPORTADOS
El déficit comercial de Estados Unidos cayó inesperadamente a 26.000 millones de dólares en mayo, la cifra más baja desde noviembre de 1999, ya que las exportaciones subieron mientras que las importaciones disminuyeron, dijo el Gobierno.
El nivel de importaciones de mayo fue el menor desde julio del 2004 y representó el décimo mes seguido de caídas, ofreciendo nueva evidencia de demanda débil en Estados Unidos.
El Departamento de Comercio informó que las exportaciones se incrementaron un 1,6 por ciento a 123.300 millones de dólares mientras que las importaciones descendieron un 0,6 por ciento a 149.300 millones de dólares.
Los economistas decían que la baja de las importaciones indicaba una continua debilidad.
"El reporte del déficit comercial es otro indicador de que las cosas no mejoran como se esperaba", dijo William Larkin, gerente de cartera de Cabot Money Management en Boston.
"Existe un creciente pesimismo sobre cuán rápido se recuperará Estados Unidos, lo que, según creo, será más lento de lo que prevén muchos", agregó.
No obstante, el desempeño exportador más fuerte de lo anticipado podría incrementar la contribución del comercio al crecimiento económico en el segundo trimestre.
La economía estadounidense se derrumbó a un ritmo anual de 5,5 por ciento en los tres primeros meses del año. Los economistas ahora anticipan un declive mucho menor en el segundo trimestre, con una reactivación de la expansión en el segundo semestre.
Un índice del crecimiento económico estadounidense a futuro subió en la última semana, llevando su tasa de crecimiento anual al récord en dos años, lo que sugiere que la recesión terminará en el corto plazo, dijo un grupo de expertos.
El Instituto de Investigaciones del Ciclo Económico (ECRI, por sus siglas en inglés), un grupo independiente, dijo que su indicador semanal adelantado aumentó a 118,5 en la semana terminada el 3 de julio desde un dato revisado a la baja de 117,4 la semana previa.