Actualizado 06/06/2009 07:40

RESUMEN 3-Decenas de muertos y heridos en dura protesta en Perú

Por Marco Aquino

TARAPOTO, Perú (Reuters/EP) - Duros enfrentamientos en el norte de Perú dejaron el viernes hasta 33 muertos y 113 heridos, entre indígenas y policías, en la peor protesta contra el Gobierno del presidente Alan García de parte de nativos amazónicos que piden eliminar leyes que afirman vulneran sus territorios.

El primer ministro, Yehude Simon, dijo que los fallecidos eran 11 policías y tres indígenas aunque el líder amazónico, Alberto Pizango, dijo que los nativos muertos sumaban 22.

Miles de indígenas iniciaron una protesta en abril para exigir la derogatoria de varias leyes aprobadas el año pasado por el Gobierno de García, que busca incentivar la inversión privada en zonas ricas en petróleo y gas.

Simon refirió que varios de los policías fueron emboscados y asesinados con lanzas. Además precisó que del total de heridos, 19 eran heridos de bala.

"El Gobierno ha actuado como debería de actuar un Gobierno democrático (...) para poner orden y disciplina", dijo Simon en rueda de prensa, acompañado con varios ministros del Gabinete.

Los enfrentamientos llevaron a cientos de indígenas molestos a tomar como rehenes a decenas de policías.

"Unas 2.000 personas permanecen dentro de la estación 6 de Petroperú y están listos para incendiarla si la policía que llegó los ataca", dijo el representante indígena Carlos Huamán a la radio local RPP.

"Los 38 policías han sido llevados a la montaña acompañados por 400 hermanos awajun", agregó.

Dentro de este espiral de violencia, en la región andina de Ayacucho, al sureste de Lima, al menos un militar murió y otros cuatro resultaron heridos el viernes, luego de que rebeldes de Sendero Luminoso atacaron con armas de largo alcance una base militar y un helicóptero que estaba en tierra.

Los enfrentamientos entre indígenas y policías podrían generar una crisis política con la posible renuncia del primer ministro de García, en un país con una historia de discordias entre las élites ricas de la costa y los pobres indígenas de los Andes y Selva.

"Yo quiero responsabilizar al Gobierno del presidente Alan García por ordenar el genocidio. Ellos nos están tirando balas como animales", dijo el líder de los nativos de la zona, Alberto Pizango, en una conferencia con la prensa extranjera.

Las protestas han obligado a la empresa estatal Petroperú a cerrar temporalmente el único oleoducto que transporta crudo de la selva norte hasta la costa del Pacífico. Asimismo, la argentina Pluspetrol paró su producción en el norte del país debido a la falta de capacidad de almacenamiento.

El presidente García lamentó las muertes y acusó a los dirigentes de los nativos de provocar a la policía al momento de despejar las carreteras bloqueadas, en una protesta que, según dijo, tiene el apoyo de políticos opositores.

"Pizango ha caído así en un nivel delincuencial. Asaltar una comisaría, arrebatar armas a los policías, victimar policías que mueren en el cumplimiento de su deber", afirmó el mandatario, cuya popularidad cayó en mayo por segundo mes consecutivo para ubicarse en un 30 por ciento.

CRISIS POLITICA

Líderes políticos pidieron la renuncia del primer ministro y de la ministra del Interior, Mercedes Cabanillas.

"Esto es perjudicial para el país, el Gobierno debe derogar los decretos supremos", dijo el ex presidente de Perú Alejandro Toledo a la estación de televisión por cable, Canal N.

Los nativos dicen que la protesta es por la intransigencia del Gobierno y el Congreso que no quieren derogar las leyes que afirman afectan la propiedad de sus tierras.

El Congreso, con mayoría oficialista, suspendió el jueves la discusión para derogar "La Ley Forestal y Fauna Silvestre", que según el Gobierno regula la inversión privada en el sector, pero los nativos dicen que permite depredar los bosques.

Opositores critican al Gobierno de García por no trasladar los beneficios del crecimiento económico que ha registrado el país minero sudamericano en los últimos años, aunque la pobreza aún bordea el 36 por ciento.

Analistas afirman que el conflicto podría provocar la salida de Simon y con ello, una crisis en el gabinete.

El director de la Policía Nacional, José Sánchez Farfán, informó que los policías chocaron con los nativos en la zona "Curva del Diablo" cuando intentaban desbloquear una carretera de la localidad de Bagua Grande, en la región de Amazonas.

En esa zona, el Gobierno dispuso un toque de queda como una medida para disminuir la violencia.

Sánchez Farfán informó que 639 policías iniciaron una operación para recuperar el orden en Bagua y restablecer el paso de vehículos varados desde hace más de una semana.

Según reportes de radio y televisión, habría al menos 2.000 indígenas en protesta en Bagua, a unos 1.400 kilómetros al norte de Lima, muchos de ellos portando flechas y lanzas.

El líder opositor el nacionalista Ollanta Humala rechazó las acciones del Gobierno en la localidad de Bagua.

"El Gobierno ha decidido resolver el problema social, económico y político, no en el Congreso, sino en el campo de batalla", dijo Humala en una conferencia de prensa.

La Defensoría del Pueblo, la Iglesia Católica y organismos de derechos humanos exigieron al Gobierno, en comunicados separados, detener los enfrentamientos en Bagua.

(Con la colaboración de Terry Wade, Teresa Céspedes y Dana Ford, Editado por Gabriela Donoso, Patricia Avila, Silene Ramírez, Juana Casas)