Publicado 15/06/2020 13:16

R.Unido.- Los laboristas acusan a Boris Johnson de buscar una "guerra cultural" en relación con la estatua de Churchill

MADRID, 15 Jun. (EUROPA PRESS) -

El laborista David Lammy, ministro de Justicia británico en la sombra, ha acusado este lunes al primer ministro, Boris Johnson, de buscar una "guerra cultural" en relación con las protestas contra el racismo y la estatua de Winston Churchill.

En una entrevista, Lammy ha lamentado que el mandatario insista en "hablar de estatuas" en vez de en los "fracasos de las políticas conservadoras". Así, ha acusado a Johnson de impulsar una "guerra cultural" como medida de distracción, según ha informado el diario 'The Guardian'.

"El Partido Laborista no está hablando de estatuas. Los liberaldemócratas tampoco están pidiendo que retiren la estatua de Churchill. Tampoco los Verdes. Los únicos que quieren centrarse en esto son los conservadores y, francamente, es raro", ha aseverado.

En este sentido, ha advertido de que los 'tories' quieren una "guerra cultural para desviar la atención de los asuntos importantes". Así se ha referido Lammy al artículo de opinión escrito por Johnson para el periódico 'The Telegraph' a raíz de las protestas antirracistas en las que algunos manifestantes han calificado a Churchill de racista y han hecho un graffiti en la estatua situada cerca del Big Ben.

"Haz algo. Cambia las cosas. Están en el poder. Llevas una década en el poder", ha insistido Lammy frente a las políticas conservadoras. En su artículo, Johnson ha defendido nuevamente la figura de Churchill y ha instado a evitar una "distorsión de la Historia".

"Si empezamos a purgar y a retirar las imágenes de todos menos los que tengan opiniones y actitudes diferentes a las nuestras estaremos participando de una gran mentira, una distorsión de la Historia", señaló. Para el primer ministro, Churchill fue un "héroe" y ha insistido en que es "absurdo" que dicho monumento corra el riesgo de ser atacado por "manifestantes violentos".

No obstante, durante las protestas muchas personas han instado a una "revisión del legado del que fuera primer ministro, incluida su postura supremacista y su permisión ante la brutalidad ejercida por las fuerzas coloniales británicas en India".