Publicado 23/06/2020 11:24

Rusia/EEUU.- El exmarine estadounidense Paul Whelan no recurrirá la condena a 16 años de cárcel en Rusia por espionaje

Rusia/EEUU.- El exmarine estadounidense Paul Whelan no recurrirá la condena a 16
Rusia/EEUU.- El exmarine estadounidense Paul Whelan no recurrirá la condena a 16 - Kristina Kormilicyna - Archivo

MADRID, 23 Jun. (EUROPA PRESS) -

Paul Whelan, el exmarine de Estados Unidos condenado a 16 años de prisión en Rusia por cargos de espionaje, no presentará recurso contra su condena, según ha contado su abogada, Olga Karlova, en declaraciones a la agencia de noticias rusa Tass.

"Acabamos de visitar a Paul en el centro de detención de Lefortovo, donde ha tomado la decisión de no recurrir y de hacer la declaración correspondiente. Después de que la sentencia entre en vigor, nuestro cliente y nosotros decidiremos si presentamos una solicitud de indulto", ha explicado la letrada.

El 15 de junio, un tribunal ruso condenó a 16 años de cárcel a Whelan por cargos de espionaje derivados de la supuesta obtención de material clasificado, en un nuevo capítulo de un caso que marca un pulso político entre Moscú y Washington.

La Fiscalía pedía para Whelan 18 años de prisión, pero finalmente el juez dictó dos años menos de encarcelamiento, que deberá pasar en una prisión de máxima seguridad. El acusado, que en todo momento ha defendido que es inocente, anunció inicialmente que recurriría el fallo judicial aunque finalmente ha decidido no hacerlo.

Whelan, que tiene pasaporte estadounidense, canadiense y británico, fue detenido en diciembre de 2018 en un hotel de Moscú por agentes del Servicio Federal de Seguridad (FSB). Según la Inteligencia rusa, se le encontró un dispositivo de memoria externa que contenía información clasificada.

El exmarine estadounidense, de 50 años, sostiene que le tendieron una trampa. De acuerdo con su versión, el 'pendrive' se lo dio un conocido ruso y creía que contenía fotos de vacaciones.

Hace varias semanas, fue intervenido de una hernia abdominal, según la Embajada de Estados Unidos, en una "operación de urgencia". "Las autoridades esperaron hasta que su condición fuese extrema para proporcionarle atención médica", lamentó la legación, cuya portavoz, Rebecca Ross, aseguró que el exmarine estaba detenido "sin pruebas de haber cometido ningún delito".