SAN SALVADOR, 15 Dic. (EUROPA PRESS) -
El ex presidente de El Salvador Antonio Saca (2004-2009) ha asegurado este martes que las acusaciones de corrupción "son inventos que no han podido probar" y ha asegurado que su expulsión del partido Alianza Republicana Nacionalista (ARENA) lo hace "víctima" de una política que pretende modificar a ese grupo político de derecha.
"Con mi expulsión, ARENA le da la espalda a más de un millón de salvadoreños que me apoyan y todo eso son inventos que no han podido probar", aseguró Saca en declaraciones a una cadena local.
Tras una decisión unámime, Saca fue expulsado este lunes de ARENA, el partido político que mantuvo el poder en El Salvador durante 20 años y que perdió los pasados comicios del mes de abril ante el actual mandatario, Mauricio Funes, del izquierdista Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN).
Saca afirmó que está siendo "víctima de calumnias y de la destrucción de un partido que va perdiendo su rumbo" y responsabilizó al líder de esa agrupación de derechas, el ex mandatario Alfredo Cristiani, de la crisis que actualmente está viviendo uno de los partidos más importantes de El Salvador.
Cristiani ha acusado al ex presidente de graves hechos de corrupción durante su mandato, al tiempo que le responsabiliza de "traicionar" y querer dividir al partido al imponer a Rodrigo Ávila como candidato en los pasados comicios, entre otras cosas.
Pese a que la decisión de expulsar a Saca fue tomada por unanimidad por el Consejo Ejecutivo de Alianza Republicana Nacionalista (Coena), el ex mandatario ha dicho que se trata de un "grupo muy pequeño del partido" que "obligó" a miembros de ARENA a firmar la resolución final.
En este sentido, aseguró que durante el encuentro realizado en la sede ARENA no presentaron pruebas en su contra para sustentar las acusaciones de corrupción, por lo que aseguró que el partido ha "violado" su derecho a seguir siendo presidente honorario.
Por otra parte, Saca ha descartado integrarse en la Gran Alianza por la Unidad Nacional (GANA), partido formado el pasado mes de octubre por 12 diputados disidentes de ARENA que, a su vez, han sumado fuerzas con el FMLN para respaldar algunos proyectos de importancia que ha promovido Funes.
"Quiero descartar responsabilidad en la formación de GANE, porque no me integraré a ningún partido salvo que el país se vea en una emergencia", aclaró Saca.