Actualizado 23/07/2015 00:11

Senadores españoles intentarán reunirse con presos políticos en Venezuela

CARACAS, 21 Jul. (Notimérica) -

   Un grupo de senadores españoles y latinoamericanos, entre los que se encuentran Iñaki Anasagasti, del Partido Nacionalista Vasco; José Miguel Camacho, del Partido Socialista Obrero Español; Andrés Gil García, de Convergéncia i Unió; y el uruguayo Pablo Mieres, del Partido Demócrata Cristiano, visitan Venezuela en solidaridad con los dirigentes de la oposición que han sido inhabilitados y de los presos políticos.

   Así lo ha anunciado este martes en Caracas el secretario ejecutivo de la Unidad, Jesús Chúo Torrealba, quien estaba acompañado por Lilian Tintori y Mitzy de Ledezma, esposas de los líderes Leopoldo López y Antonio Ledezma, respectivamente.

     Torrealba señaló que la estancia de los senadores  será el miércoles, jueves y viernes, y destacó que el grupo irá, junto a miembros de la Unidad, a la cárcel de Ramo Verde, Helicoide y residencia del alcalde Metropolitano, donde cumple casa por cárcel.

   "Van a reunirse también con los inhabilitados. Ustedes recordarán que el pasado viernes, nosotros anunciamos la organización de una serie de acciones nacionales e internacionales para denunciar esta situación", dijo.

   El máximo vocero de la alternativa democrática, dijo que la idea es que tengan una visión completa, no "solamente de los abusos políticos del Gobierno, si no además del drama humanitario, del drama social que sirve de contexto a estos abusos".

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   Entre los graves problemas que afronta el país, destacó la más reciente medida del Gobierno, la cual obliga a los productores privados a desviar sus productos hacia la red pública: Mercal, Pdval y Mercados Bicentenario.

   "Desviar hacia la red pública de venta de alimentos entre el 30 y el 100 por ciento de la producción de siete rubros fundamentales es una locura", dijo Torrealba, quien recordó que la red privada de distribución de alimentos tiene casi 114.000 puntos de venta.

   Por ello resaltó que concentrar en 7.000 puntos de la red pública, los alimentos que estaban destinados a 114.000 puntos de venta en la red privada, "es sencillamente, no la multiplicación de los alimentos, sino la multiplicación de las colas", concluyó.