WASHINGTON, 19 Sep. (Reuters/EP) -
Siete ex directores de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) instaron ayer al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, a que suspenda la investigación sobre los presuntos abusos cometidos por los servicios secretos en el extranjero.
El pasado mes de agosto el Fiscal General de Estados Unidos, Eric Holder, nombró a un fiscal especial para que estudiase si se debían presentar cargos contra los contratistas y agentes de la CIA encargados de realizar los interrogatorios en el extranjero y que, presuntamente, utilizaron métodos excesivos, entre ellos el 'waterboarding', la simulación de ejecuciones o el uso de una taladradora eléctrica para amedrentar y obtener testimonios de los detenidos.
En una carta enviada a Obama, los antiguos máximos responsables de la CIA alegaron que la investigación podría perjudicar las operaciones en curso y señaron que los casos que están siendo investigados ya fueron examinados por el anterior Gobierno.
"Esta propuesta podría dañar seriamente la voluntad de los agentes a la hora de tomar ciertos riesgos para proteger a su país", apuntaron. "A nuestro juicio, ese tipo de riesgos son vitales para tener éxito en la larga y difícil batalla contra el terrorismo", añadieron.
La misiva está firmada por tres de los directores de la CIA durante el mandato de George W.Bush (Michael Hayden, Porter Goss and George Tenet), y otros cuatro de la Administración del ex presidente Richard Nixon (John Deutch, James Woolsey, William Webster and James Schlesinger).
Por otro lado, el diario 'Washington Post', citando dos fuentes con conocimiento de la situación, asegura en su edición digital de hoy que la investigación del Departamento de Justicia finalmente se centrará en unos pocos casos, como el de la muerte de un prisionero afgano durante un interrogatorio realizado en un complejo de la CIA en Afganistán hace siete años.