MADRID, 8 Nov. (EUROPA PRESS) -
Los líderes de Alemania, Francia, Reino Unido y Turquía participarán en una cumbre sobre Siria, en los márgenes de la cumbre que celebrará la OTAN los días 3 y 4 de diciembre en Londres.
El portavoz de la Presidencia turca, Ibrahim Kalin, ha confirmado que Ankara estará presente en el encuentro, que tendrá lugar en medio de las tensiones en el seno de la Alianza por la ofensiva de Turquía contra las fuerzas kurdas en el norte de Siria
Así, ha defendido que hubiera sido mejor celebrar la cumbre en Estambul, Sanliurfa o Gaziantep debido a la crisis de refugiados sirios en el país, al tiempo que ha confirmado que en el encuentro se abordará la 'Operación Manantial de Paz' en el país árabe.
Kalin ha subrayado que el asunto de los refugiados es especialmente importante y ha dicho que "los países europeos están examinando cómo pueden contribuir a este proceso", según ha informado la agencia estatal turca de noticias, Anatolia.
Por otra parte, ha rechazado las críticas contra Turquía por su papel en la OTAN a raíz de la ofensiva contra las fuerzas kurdas y ha reiterado que Ankara "ha dejado claro que la seguridad de Turquía es la seguridad de la OTAN".
"Hemos dicho en muchas ocasiones que no podemos eliminar a una organización terrorista con otra organización terrorista", ha señalado, en referencia al papel de la milicia kurda Unidades de Protección Popular (YPG) en la lucha contra el grupo yihadista Estado Islámico.
Turquía inició el 9 de octubre la 'Operación Manantial de Paz', que fue posteriormente pausada a raíz de sendos acuerdos con Estados Unidos y Rusia para permitir la retirada de las fuerzas kurdas de la 'zona segura' que exige Ankara en el país árabe.
La ofensiva de Turquía contra las fuerzas kurdas desató las preocupaciones internacionales por posibles fugas de yihadistas que se encontraban hasta entonces en manos de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS).
Las FDS, cuyo integrante principal son las YPG, es el principal aliado en Siria de la coalición que lidera Estados Unidos en su lucha contra Estado Islámico.
Las operaciones se iniciaron pocos días después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, acordara con Ankara la retirada de sus tropas del país, dando un giro de 180 grados a la hasta entonces firme alianza con las FDS.