Publicado 16/10/2019 08:26

Siria.- Pence y Pompeo viajarán este miércoles a Turquía para intentar negociar un alto el fuego en la ofensiva en Siria

Erdogan recalca que Turquía no va a declarar un alto el fuego

MADRID, 16 Oct. (EUROPA PRESS) -

El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, viajará este miércoles a Turquía junto al secretario de Estado, Mike Pompeo, para intentar negociar un alto el fuego en la ofensiva lanzada por Ankara contra las fuerzas kurdas en el norte de Siria.

"Mikle se está preparando para un gran viaje. Se va mañana", anunció el martes el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien afirmó que Washington "está teniendo conversaciones firmes con mucha gente".

"Estamos siendo muy duros con Turquía", dijo al anunciar el viaje de Pence y Pompeo, al tiempo que recalcó que las sanciones impuestas el lunes contra el país son "las más duras".

Así, reitrtó que Washington "pide un alto el fuego" y agregó que "Turquía y muchos otros tiene ahora que mantener sus propiedades, tienen que mantener la paz y la seguridad". "Tenemos más preparadas", advirtió.

En respuesta, el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, afirmó que Ankara no declarará un alto el fuego en Siria y agregó que no está preocupado por las sanciones de Washington, según la cadena de televisión turca NTV.

"No podemos declarar un alto el fuego hasta que limpiemos la zona y declaremos que es segura", manifestó, antes de agregar que las Unidades de Protección Popular (YPG) "están perdiendo terreno rápidamente".

Por otra parte, destacó que la entrada de las tropas sirias en la localidad de Kobani y Manbij "no es negativa". "No estamos seriamente interesados en Kobane ahora mismo, pero si hay una situación diferente, se puede intervenir", alertó.

Erdogan mantuvo además una conversación telefónica con su homólogo ruso, Vladimir Putin, para abordar la ofensiva, según recogió la agencia estatal turca de noticias, Anatolia.

Durante la misma, ambos hicieron hincapié en la necesidad de evitar enfrentamientos entre los militares turcos y sirios en el norte del país árabe, según el Kremlin, citado por la agencia rusa de noticias Sputnik.

Putin alertó además "sobre el deterioro de la situación humanitarias en zonas de Siria fronterizas con Turquía" y tildó de "inaceptable" que la situación "sea aprovechada por los miembros de organizaciones terroristas, incluido Estado Islámico, que hoy en día están bajo custodia de los grupos armados kurdos".

El Gobierno de Rusia afirmó el mismo martes que su Policía Militar está llevando a cabo patrullas en el distrito sirio de Manbij, en la línea de contacto entre los ejércitos de Siria y Turquía.

Por su parte, el enviado especial del Kremlin a Siria, Alexander Lavrentiev, recalcó que considera "inadmisible" la ofensiva turca y agregó que Moscú no ha prestado apoyo la misma.

LA OFENSIVA

Ankara inició la 'Operación Manantial de Paz' días después de que Trump diera un giro de 180 grados a la alianza de Washington con las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), hasta entonces un aliado clave en la lucha contra Estado Islámico, y retirara sus tropas de la zona, dando 'luz verde' a Turquía para su ofensiva.

Desde entonces, la mayoría de los países de la comunidad internacional han cargado contra Ankara y han advertido de que la operación podría tener un impacto negativo contra la lucha contra el grupo yihadista.

El Ejército sirio empezó lunes a desplegarse en varios puntos clave del noreste de Siria tras el acuerdo alcanzado con líderes kurdos sirios para contrarrestar la ofensiva. Los kurdos han tildado de "puñalada por la espalda" la decisión de Trump.

En este sentido, el dirigente kurdo sirio Aldar Xelil explicó que el acuerdo con Damasco es una "medida de emergencia" acordada con Damasco bajo la supervisión de Rusia para tratar de impedir los ataques turcos en la frontera siria.