MADRID, 20 Ago. (EUROPA PRESS) -
Un oficial de la Policía ha sido suspendido y varias decenas de agentes han sido detenidos en relación con las sospechas de que podrían haber facilitado el atentado cometido el domingo por el grupo terrorista Al Shabaab contra un hotel de Mogadiscio que se saldó con más de una decena de muertos, según informa el medio local Garowe Online.
El jefe de la Policía, general Abdi Hassan Hijar, ha suspendido al comisario del distrito capitalino de Abdulaziz, Ahmed Abdullahi Bashane, y ha precisado que los agentes detenidos serán interrogados para determinar si colaboraron con los terroristas para facilitarles el paso en algunos puestos de seguridad de la capital.
"Estamos recabando pruebas y una vez establezcamos los nexos, serán detenidos formalmente e imputados en los tribunales", ha asegurado Abdi. "No podemos tolerar incidentes en los que oficiales gubernamentales conspiran con criminales contra nuestro pueblo", ha defendido el jefe de la Policía.
"Garantizaremos que los culpables se enfrentan al Estado de Derecho por interferir en nuestros sistemas de seguridad", ha prometido, insistiendo en que la "obligación" de las fuerzas de seguridad es proteger a los ciudadanos.
El ataque contra el hotel Elite, situado en la conocida playa de Lido de la capital somalí, se saldó con al menos 16 muertos, entre los que figuran algunos cargos gubernamentales, y decenas de heridos. Aunque Al Shabaab fue desalojado de Mogadiscio hace años, el grupo terrorista, vinculado a Al Qaeda, lleva a cabo con frecuencia atentados en la ciudad.
Por otra parte, según informa la BBC, al menos 27 personas, entre ellas doce guardias penitenciarios, han sido detenidos por presuntamente introducir armas en la prisión de Mogadiscio en la que se produjo la semana pasada un tiroteo entre milicianos encarcelados y las fuerzas de seguridad en un intento de fuga.
Entre los detenidos, según ha desvelado el ministro de Justicia, Hassan Hussein, al término de la investigación de los hechos, también figuran nueve reclusos y seis civiles. A la prisión se habrían introducido pistolas, munición e incluso granadas de mano.