Actualizado 08/06/2009 18:32

Stent no son mejores que fármacos en los diabéticos cardíacos

Por Julie Steenhuysen

CHICAGO (Reuters/EP) - Los pacientes diabéticos con enfermedad cardíaca estable obtienen resultados igualmente buenos cuando sólo toman medicación y cuando se realizan de manera temprana una angioplastia o un bypass para desbloquear arterias del corazón tapadas, informaron investigadores.

Un equipo estadounidense dijo que los pacientes a los que se les aconseja realizarse una angioplastia y colocarse un stent cardíaco para reparar el flujo sanguíneo y aliviar el dolor de pecho podrían esperar de manera segura y darle a los medicamentos la posibilidad de funcionar.

No obstante, aquellas personas con enfermedad más severa a las que se les indica someterse a una cirugía de bypass más agresiva podrían evitar un ataque cardíaco futuro si se realizan la operación rápidamente.

El estudio también reveló que no hay diferencia en los riesgos cardíacos entre dos estrategias para tratar a los pacientes con diabetes tipo 2.

Se trata de aumentar la cantidad de insulina o reducir la resistencia del cuerpo a la propia hormona con fármacos como metformina o Avandia de GlaxoSmithKline, también conocido como rosiglitazona, que se pensaba que incrementaba el riesgo de infartos.

"Si se tiene diabetes y enfermedad cardíaca y se recomienda una cirugía de bypass, debería realizarse tempranamente en lugar de demorarla", dijo el doctor Trevor Orchard, de la University of Pittsburgh, cuyo estudio fue publicado en New England Journal of Medicine.

Orchard señaló que la investigación, también presentada en una reunión de la Asociación Estadounidense de Diabetes en Nueva Orleans, ofrece evidencia sobre cómo tratar mejor a las personas que padecen tanto diabetes tipo 2 como enfermedad cardíaca o accidente cerebrovascular (ACV).

Para GlaxoSmithKline, el estudio representa una señal positiva de que Avandia sería más seguro de lo que sugerían análisis previos.

No obstante, éste sería un revés para los fabricantes de stent, como Boston Scientific Corp y Johnson & Johnson, cuyas ventas en Estados Unidos se desplomaron después de que un estudio similar de hace dos años mostrara que los dispositivos no eran mejores que los fármacos a la hora de prevenir la muerte y los infartos en los pacientes cardíacos.

Los stent son pequeños tubos de malla que abren adecuadamente las arterias enfermas que han sido desbloqueadas durante una angioplastia.

En un comentario en la revista, el doctor William Boden, de la University at Buffalo en Nueva York, dijo que los médicos deberían cuestionar por qué tantos diabéticos aún son sometidos a angioplastias.

Los diabéticos con dolor de pecho estable representan alrededor del 40 por ciento de los pacientes estadounidenses a los que se les realiza una angioplastia, según el analista de Wachovia Larry Biegelsen, quien dijo que los resultados podrían reducir los procedimientos en Estados Unidos un 3 por ciento.

El estudio incluyó a 2.368 pacientes que fueron tratados directamente con angioplastia, usualmente con un stent, y medicamentos o simplemente con terapia farmacológica. No se hallaron diferencias en las tasas de muerte, ataque cardíaco o ACV después de cinco años.