Actualizado 08/06/2009 22:30

Strauss-Kahn de FMI advierte de riesgos repunte 2010

Por Louise Egan

MONTREAL (Reuters/EP) - El Fondo Monetario Internacional (FMI) mantuvo el lunes su proyección de una recuperación económica global para inicios del 2010, pero alertó que su predicción está sujeta a numerosos riesgos y que todavía se debe trabajar mucho para sanear los balances de los bancos.

El director gerente del FMI, Dominique Strauss-Kahn, dijo que prevé que comience el repunte en el otoño boreal de este año.

"El 2009 ya está dado y cualquier cosa que hagamos en términos de política económica, las cifras en términos de crecimiento y empleo serán malas", dijo en un discurso en la Conferencia de Montreal, un evento anual.

"Todavía creemos, como lo hemos dicho por meses, que el escenario más creíble es que la recuperación tendrá lugar en el primer semestre del 2010, con el punto de inflexión en septiembre, octubre, empezando el crecimiento a fines de este año y luego realmente el primer trimestre positivo como el primero o el segundo del 2010", dijo.

Sin embargo, dijo que la proyección del FMI es condicional a que los países implementen las "políticas correctas" y advirtió que el mayor riesgo a su panorama es que las naciones tarden mucho para sanear los activos tóxicos de sus sistemas bancarios.

A través de las numerosas crisis financieras que ha tenido que enfrentar el FMI en su historia, hay una constante que siempre ha requerido para que tenga lugar una recuperación, indicó.

"Nunca hay recuperación hasta que se complete el saneamiento de la hoja de balance del sector financiero", declaró.

Posteriormente, dijo a la prensa que para que la confianza regresara, los bancos deberían desclasificar no sólo sus pérdidas relativas a las hipotecas de riesgo estadounidenses, sino también otras pérdidas conectadas con la desaceleración económica.

"Lo que estamos viendo es que todavía existe un sistema de créditos, o de pérdidas, que no se ha hecho público. Estas no son cosas que estén relacionadas hoy con la crisis original de hipotecas de riesgo, pero el hecho es que la desaceleración económica se ha traducido en un cierto número de activos de calidad pobre y que hay nuevas pérdidas registradas", dijo.

"La pérdida de confianza proviene del hecho de que no sabemos exactamente dónde se encuentran las pérdidas y qué son", agregó.

Los mercados de crédito todavía no han regresado a la normalidad, afirmó.

CRISIS EN NACIONES EMERGENTES

Advirtió también que economías emergentes como México, Colombia y Polonia enfrentan grandes déficit financieros que, de no ser tratados, podrían ponerlos en un riesgo de moratoria y propagarse a través de las economías regionales y globales.

Eso no se debe a políticas equivocadas en esos países, sino más bien a una desecación en los flujos de ingresos de capital por motivo de la crisis.

"Creo que estos tipos de brechas en el financiamiento en mercados emergentes ahora están bajo control, pero nunca se sabe", dijo.

La crisis económica en las naciones más pobres del mundo podría fácilmente llevar a agitación social, inestabilidad política e inclusive guerra, lo que se derramaría sobre la economía global, aun cuando esos países normalmente tienen poca influencia sobre los mercados financieros.

El FMI está en proceso de crear un sistema de advertencia anticipada para intentar mitigar el impacto de crisis financieras futuras. Strauss-Kahn dijo que algunos Gobiernos estaban incómodos con la idea de publicar información acerca de sus sistemas bancarios, pero dijo que el FMI tendría un ejercicio de advertencia anticipado completo listo para sus reuniones del otoño (boreal) en Estambul.

"Vamos a hacerlo de todos modos", dijo. El énfasis estaría en los movimientos de precios, inflación, y la necesidad de evitar reacciones cortoplacistas a las crisis, como el proteccionismo, dijo.

Mientras los signos de la recuperación empiezan a surgir, la atención de los encargados de definir las políticas estará en las estrategias para resolver inmensos déficit fiscales, estímulos monetarios y la nacionalización de los bancos y otras empresas. Estas medidas eran necesarias y tuvieron éxito en evitar una recesión aun peor, dijo Strauss-Kahn, pero deshacerlas representará un costo en los años venideros, advirtió.