Por Andrew Heavens
JARTUM (Reuters/EP) - Sudán retrasará dos meses sus elecciones nacionales para abril del 2010, dijeron el martes funcionarios, la segunda vez que se pospone la votación que será la primera elección democrática del país en dos décadas.
La Comisión Electoral Nacional de Sudán dijo que retrasos en la publicación de detalles del censo y una decisión de posponer el registro de los votantes hasta después de la temporada de lluvia eran razones para cambiar la programación de la votación por segunda vez en tres meses.
"La Comisión Electoral Nacional ha estado deliberando y observando las circunstancias relacionadas con las elecciones nacionales y ha decidido modificar la programación previa", decía un comunicado firmado por el presidente de la Comisión Abel Alier.
Al país más grande de Africa se le prometieron elecciones democráticas presidenciales y parlamentarias bajo un acuerdo de paz del 2005, que puso fin a más de dos décadas de guerra civil entre el norte y el sur de Sudán.
Los principales partidos tanto en el norte como en el sur de Sudán han dicho en el pasado que se resistirán a acciones por retrasar la votación, pero la comisión independiente tiene el poder de fijar plazos para las elecciones sin la aprobación de los políticos.
Los sureños están particularmente preocupados de que cualquier retraso pueda afectar el momento para el largamente esperado referendo, programado para enero del 2011, sobre si su territorio debería dividirse como un estado independiente.
El enviado especial estadounidense Scott Gration visitó Sudán en mayo para asegurarse que llevara a cabo elecciones "creíbles" y prometió el apoyo de Washington para el referendo sobre la independencia del sur.
En su visita de mayo, percibida como una señal de que las tensiones diplomáticas entre Washington y Jartum podrían estar disminuyendo, también llamó a la aprobación de una legislación vista como un pre requisito para unas elecciones y un referendo libres y justos.
Se espera que el actual presidente Omar Hassan al-Bashir se presente a las elecciones, pese a una decisión de este año de la Corte Penal Internacional de emitir una orden de arresto en su contra acusándolo de crímenes en Darfur.