Publicado 02/11/2020 13:28

Sudán del Sur.- Un trabajador humanitario muerto y otro herido en un ataque en Sudán del Sur

Desplazados por las inundaciones en Sudán del Sur
Desplazados por las inundaciones en Sudán del Sur - OCHA/ANTHONY BURKE

MADRID, 2 Nov. (EUROPA PRESS) -

Un trabajador humanitario murió y otro más resultó herido este sábado en un ataque perpetrado por hombres armados en una carretera próxima a la ciudad de Pibor, en el este de Sudán del Sur, según ha denunciado este lunes el coordinador humanitario de la ONU en el país, Alain Noudéhou.

Un equipo de la ONG Plan International regresaba de ofrecer servicios nutricionales a niños y madres lactantes afectadas por la violencia y las inundaciones en la zona cuando fue atacado por hombres armados no identificados, dejando un muerto en el lugar de los hechos y un herido grave por herida de bala.

"Condeno firmemente este ataque y el asesinato de otro trabajador humanitario más", ha señalado Noudéhou en un comunicado, subrayando que ya son ocho los cooperantes asesinados este año en el que es el país más nuevo del mundo, algo que ha tachado de "inaceptable".

"Pido una vez más a las autoridades y las comunidades a todos los niveles que garanticen la seguridad de los trabajadores humanitarios y a las personas que sirven", ha reclamado, subrayando que "los autores de este acto violento deben ser llevados ante la justicia y rendir cuentas".

Como resultado de este ataque, el programa nutricional, financiado por el Fondo Humanitario para Sudán del Sur, ha quedado temporalmente suspendido. El estado de Jonglei y el gran Pibor figuran entre las zonas más afectadas por las inundaciones y la inseguridad alimentaria.

"Los trabajadores humanitarios necesitan un entorno para trabajar seguro con el fin de suministrar los tan necesarios servicios humanitarios a la población. La violencia y los ataques contra los actores humanitarios deben cesar", ha reivindicado Noudéhou.

Según los últimos datos de la ONU, en el país hay 7,5 millones de personas necesitadas de asistencia humanitaria y 1,6 millones de desplazados internos por la persistente violencia como resultado del conflicto que estalló en 2013, así como por las devastadoras inundaciones ocasionadas por la estación de lluvias.