Publicado 01/11/2019 20:40

Terrorismo.- EEUU investiga al nuevo líder de Estado Islámico tras la muerte de Al Baghdadi

WASHINGTON, 1 Nov. (EUROPA PRESS) -

Estados Unidos está investigando quién es el nuevo líder de Estado Islámico, Abú Ibrahim al Hashemi al Quraishi, tras la muerte de su predecesor, Abú Bakr al Baghdadi, en un operativo estadounidense llevado a cabo el pasado 26 de octubre en Idlib (Siria), según ha informado este viernes el coordinador antiterrorista de la Casa Blanca, Nathan Sales.

"Estamos investigando al nuevo líder, de dónde viene, su papel en la organización", ha dicho Sales en la rueda de prensa que ha ofrecido para presentar el informe anual que elabora el Departamento de Estado sobre terrorismo global.

"No tengo nada más que anunciar, al menos públicamente", ha apostillado ante la insistencia de los periodistas. "Lo que sí sabemos es que va a tener que enfrentarse a una enorme presión sistemática por nuestra parte y la de nuestros socios", ha apostillado.

Sales ha aclarado que, pese a la muerte de Al Baghdadi, "Estado Islámico sigue siendo la máxima prioridad de Estados Unidos" en materia de lucha antiterrorista y por ello "seguirá utilizando todas las herramientas del poder del Estado", específicamente las militares, financieras y de Inteligencia.

Las declaraciones de Sales contrastan con las del presidente estadounidense, Donald Trump, que horas antes ha asegurado vía Twitter que Estados Unidos sabe "exactamente" quién es el nuevo líder de Estado Islámico.

El grupo yihadista dio a conocer al sucesor de Al Baghdadi y a su nuevo portavoz, Abú Hamza al Qurashi, en un mensaje de audio de unos ocho minutos de duración difundido el jueves por sus canales habituales de propaganda.

La organización terrorista aseguró que ambos son descendientes del profeta Mahoma, una condición que también se le atribuía a Al Baghdadi y que le permitió declararse califa en 2014.

ESTADO ISLÁMICO, IRÁN Y VIOLENCIA INTERÉTNICA

Por otro lado, Sales ha señalado "tres tendencias clave" en el terrorismo global durante el último año.

"En primer lugar, Estados Unidos y sus socios de la coalición casi completaron la destrucción del 'califato' de Estado Islámico y aumentaron la presión sobre su red global de grupos terroristas", ha indicado.

Estado Islámico perdió en 2017 sus 'capitales' de Mosul (Irak) y Raqqa (Siria), a lo que siguió una desintegración territorial del 'califato' que proclamó en 2014 en ambos países. Sin embargo, aún controla algunas zonas donde lleva a cabo acciones de insurgencia.

Así, Sales ha destacado su "gran capacidad para adaptarse, especialmente a través de sus esfuerzos para inspirar o dirigir a sus seguidores 'online'", y el "nuevo peligro" que representan los combatientes extranjeros que regresan a sus países desde Siria e Irak.

En segundo lugar, ha continuado, "la República Islámica de Irán sigue siendo el peor país patrocinador del terrorismo y la Administración de Estados Unidos sigue lidiando con él con presión económica y diplomática".

Por último, ha llamado la atención sobre el incremento de la violencia terrorista por motivos étnicos, "una tendencia preocupante" que Washington viene observando en los últimos años.

Además, Sales ha precisado que el 85 por ciento de los "incidentes terroristas" registrados en estos doce meses se concentraron en tres regiones del mundo: Oriente Próximo, el sur de Asia y el África subsahariana.