BOGOTA (Reuters/EP) - El trámite de conciliación de un referendo que habilita al presidente de Colombia, Alvaro Uribe, para buscar su segunda reelección inmediata fue aplazado el viernes por un mes, aumentando el riesgo de que se hunda y el mandatario quede impedido para postularse en el 2010.
La comisión de conciliación que se reunió no llegó a un acuerdo y decidieron reasumir el tema en el próximo periodo legislativo que comienza el 20 de julio, salvo que el Gobierno convoque a sesiones extraordinarias.
"Yo veo que los tiempos no alcanzan para conciliar el texto del referendo antes del 20 de junio", dijo el ministro del Interior Fabio Valencia, quien no reveló si el Gobierno contempla convocar a sesiones extras al Congreso.
Los impulsores del referendo tendrían que esperar al menos un mes para que lograr un acuerdo y enviar el proyecto a la Corte Constitucional para su estudio de legalidad.
Valencia reconoció que con el aplazamiento de la conciliación del referendo para después del 20 de julio, el Gobierno lo estaría convocando a comienzos del 2010.
"Creo que en el peor de los casos la Corte Constitucional podría estar dando su concepto de exequibilidad o inexequibilidad por ahí en noviembre y el referendo podría estar siendo convocado para enero", declaró el ministro a periodistas.
Pero expertos han advertido que el análisis por parte del tribunal podría tardar más allá de los cálculos del Gobierno, lo que lo haría inviable por falta de tiempo.
Una carta del registrador Carlos Ariel Sánchez, en la que afirmó que no ha certificado aún la legalidad del trámite del referendo, respaldado por cuatro millones de personas, aumentó el temor entre los congresistas de incurrir en un posible delito después de que la Corte Suprema de Justicia inició una investigación a 86 legisladores que lo aprobaron en la cámara.
La Cámara de Representantes aprobó la reelección a partir del 2014 y el Senado desde el 2010, por lo que se deberá buscar una conciliación que defina el año en el cual podría postularse el actual mandatario.
Si se logra la conciliación, el referendo deberá ser enviado al alto tribunal para que decida si su trámite y aprobación fue legal.
En la eventualidad de que la corte lo apruebe, deberá ser convocado y un 25 por ciento de los electores habilitados, alrededor de 7,2 millones de personas, participar votándolo a favor o en contra.
Uribe, quien asumió el poder en el 2002 y fue reelegido en el 2006, no ha dicho con claridad si está interesado en buscar su segunda reelección, pese a que goza de una alta popularidad y tiene el respaldo de los empresarios.
El mandatario enfrenta la resistencia de la oposición que ve en una nueva reelección el camino hacia un sistema de autocracia y dictadura que viola la Constitución y los controles al Gobierno.