MADRID, 13 Oct. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades de Túnez han desplegado este martes al Ejército en la ciudad de Sbeitla (centro) tras los enfrentamientos entre policías y manifestantes a raíz de la muerte de una persona durante la demolición de un kiosko de tabaco.
El portavoz del Ministerio de Defensa tunecino, Mohamed Zekri, ha destacado que el despliegue ha llegado a petición de las autoridades locales con el objetivo de proteger las instalaciones oficiales de la ciudad.
Las manifestaciones han estallado durante la jornada después de que las autoridades municipales demolieran con un buldócer el kiosko, matando a su propietario, quien se encontraba durmiendo en el interior del mismo.
La demolición ha provocado unas protestas en las que se han levantado barricadas y se han bloqueado carreteras para reclamar rendición de cuentas por parte de las autoridades por lo sucedido. La Alcaldía de Sbeitla ha abierto una investigación.
Asimismo, el primer ministro, Hichem Mechichi, ha anunciado el cese del gobernador de la provincia de Kasserine y su delegado local, así como del jefe de Seguridad del distrito y el jefe de la Policía en Sbeitla, tal y como ha recogido la emisora tunecina Mosaique FM.
Por su parte, el alcalde de Sbeitla, Faicel Remili, ha señalado que la demolición ha sido llevada a cabo por las autoridades provinciales sin informar al consistorio, antes de detallar que el fallecido es un hombre de 50 años y padre de cuatro hijos.
Las autoridades tunecinas temen que el caso pueda recordar al de Mohamed Buazizi, un vendedor callejero que en 2010 decidió prenderse fuego para protestar después de que las autoridades le confiscaran sus mercancías. Su muerte desencadenó la conocida como 'Primavera Árabe', una ola de protestas que terminaron con el derrocamiento del Gobierno de Zine el Abidine ben Alí.
Pese a que la 'Primavera Árabe' se extendió por numerosos países del norte de África y Oriente Próximo, Túnez fue el único que logró una transición pacífica a la democracia después de las revueltas populares que estallaron por primera vez en diciembre de 2010.
Sin embargo, Túnez ha pasado por nueve gobiernos distintos y ninguno ha logrado solventar los problemas económicos. La alta inflación, el desempleo y la corrupción son los principales problemas que los tunecinos llevan denunciando desde entonces, lo que ha provocado la caída de diversos Ejecutivos.