MADRID, 12 Feb. (EUROPA PRESS) -
La jefa de Asuntos Políticos y de Paz de Naciones Unidas, Rosemary DiCarlo, ha avisado de que "el riesgo de retroceso es real" en el conflicto en Ucrania si no se logran avances en los frentes políticos y de seguridad.
Así lo ha aseverado DiCarlo ante el Consejo de Seguridad en una reunión con motivo del quinto aniversario del acuerdo para poner fin a los enfrentamientos entre las fuerzas del Gobierno de Ucrania y los separatistas prorrusos.
De este modo, ha recordado que aunque el alto el fuego en el este de Ucrania ha provocado "una disminución significativa de las víctimas civiles", la situación general "sigue siendo frágil".
"El hecho de que el alto el fuego se haya mantenido en gran medida y que las discusiones continúen en los formatos establecidos no es motivo de complacencia. Tampoco es un sustituto de un progreso significativo. El riesgo de retroceso es real si las negociaciones se estancan", ha insistido, para recordar de forma positiva la tregua que entró en vigor en julio de 2020 como resultado de una cumbre celebrada en diciembre del año anterior entre Francia, Alemania, Rusia y Ucrania.
En este sentido, ha reiterado que "persisten los desafíos" en el país, como la entrega de ayuda en medio de la pandemia de la COVID-19, y ha mostrado su "preocupación" por el reciente aumento de incidentes de seguridad a lo largo de la línea que separa el territorio controlado por el Gobierno y las zonas en poder de los separatistas del este.
"Esta peligrosa tendencia debe revertirse rápidamente", ha agregado al respecto.
Por otro lado, el jefe de la Misión Especial de Vigilancia en Ucrania de la Organización para la Seguridad y Cooperación Europea (OSCE), Yasar Halit Cevik, ha incidido en que "otras violaciones han continuado a pesar de los compromisos de las partes".
En concreto, ha informado de que se han observado mejoras en las estructuras militares de ambos lados, mientras que en áreas civiles se han detectado "armas pesadas y posiciones de tipo militar".
DESAFÍO HUMANITARIO
El acceso humanitario sigue siendo un "desafío importante" en el este de Ucrania, donde más de 3,4 millones de civiles, principalmente mujeres y personas mayores necesitan asistencia continua.
La pandemia solo ha empeorado la situación, "con la libertad de movimiento a través de la línea de contacto aún más restringida". "Instamos a todos los actores con influencia a ayudar a levantar las restricciones indebidas a la libertad de movimiento a través de la línea de contacto y asegurar la apertura de puntos de cruce de entrada y salida adicionales", ha demandado en este aspecto DiCarlo.