BOGOTA (Reuters/EP) - El presidente de Colombia, Alvaro Uribe, invitó el domingo a los rebeldes de las FARC que secuestraron a un concejal de un pueblo del centro del país a liberarlo, a desertar del grupo guerrillero, y les ofreció una recompensa de 227.000 dólares.
Un comando de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia incursionó hace nueve días en el pueblo de Garzón, en el departamento del Huila, y secuestró al concejal del Partido Conservador Armando Acuña, en un ataque en el que causaron la muerte a un policía y dos guardas de seguridad privados.
Un soldado también murió en las operaciones iniciales de persecución de los guerrilleros que tienen el propósito de liberar al dirigente político.
El ataque ha sido considerado el más reciente golpe a la Política de Seguridad del presidente Uribe, quien soporta su popularidad en una ofensiva contra las FARC, grupo rebelde que perdió a varios de sus comandantes en ataques y bombardeos.
"Ofrecemos para el rescate del concejal una recompensa de hasta 500 millones de pesos", dijo Uribe en declaraciones a periodistas.
"Si los mismos guerrilleros lo liberan, abandonan las FARC, se desmovilizan, pueden contar con una recompensa hasta de 500 millones de pesos; el Gobierno les da todas las garantías" agregó.
Uribe advirtió que pese a la oferta de recompensa, el Ejército mantiene una ofensiva militar para tratar de rescatar sano y salvo al dirigente político.
Las FARC, que llegaron a tener unos 17.000 combatientes, han sido diezmadas por una ofensiva militar que ordenó Uribe y que las obligó a replegarse a apartadas zonas montañosas y selváticas.
Sin embargo, mantienen presencia en apartadas regiones rurales, la mayoría en zonas estratégicas para la producción y el tráfico de cocaína, la principal fuente de financiación del grupo rebelde, según el Gobierno.
Los ataques y los combates son frecuentes en Colombia como parte del violento conflicto interno de más de cuatro décadas que cobra miles de vidas al año.
La ofensiva del Gobierno ha incluido aumento del gasto militar, del número de efectivos y el pago de recompensas, principalmente.