BOGOTÁ, 24 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Colombia, Álvaro Uribe, ha pedido perdón este jueves por la muerte del senador Manuel Cepeda, del partido Unión Patriótica, un homicidio ocurrido en 1994 por el que la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CoIDH) acusó al Estado colombiano de ser responsable.
"Colombia tiene que pedir a toda la ciudadanía afectada por la violencia, perdón. Ofrecer perdón, pedir perdón. Corresponde al Presidente de la República hacerlo, independientemente de la época de los crímenes", expresó Uribe en rueda de prensa.
El mandatario acotó que, aunque no conoce la sentencia de la CoIDH, su obligación es condenar ese tipo de hechos violentos. "Yo no puedo decir que el Estado asesinó al senador Cepeda o al uno o al otro, lo que si puedo decir es que los asesinaron y que eso es muy grave y que eso no puede repetirse", insistió.
La CoIDH condenó al Estado colombiano por el homicidio en 1994 de Cepeda en manos de militares en una resolución emitida el pasado 26 de mayo, pero se dio a conocer ayer a través de la página web de la Corte con sede en Costa Rica. Bogotá está ahora en la obligación de indemnizar a los familiares del político y castigar a los responsables.
A este respecto, el mandatario consideró que "no se puede implorar, exigir a la justicia internacional que obligue al Estado colombiano a pedir perdón y al mismo tiempo adelantar falsas acusaciones, proceder con odio a maltratar injustamente a compatriotas, a maltratar injustamente la honra de los gobiernos" porque eso sería algo "muy grave".
De esta manera, Uribe destacó los logros que ha tenido su gobierno en materia de seguridad y defensa de los Derechos Humanos, por lo que hizo una invitación a la Corte a visitar Colombia para que vean "cómo se ha preocupado el presidente de dar garantías a todos los colombianos".
"Este es un Gobierno deliberante que conoce la firmeza, pero desconoce el odio; que trabaja con afecto por todos los colombianos y que les ha dado garantía a todos ellos", concluyó el mandatario que el próximo 7 de agosto entregará el gobierno a su pupilo, el ex ministro de Defensa Juan Manuel Santos.