Actualizado 13/11/2007 15:24

Venezuela.- Castro califica el incidente de "Waterloo ideológico" y dice que Chávez obtuvo una victoria trascendental


LA HABANA, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -

El presidente cubano, Fidel Castro, calificó hoy de "Waterloo ideológico" --en alusión a la batalla de Waterloo en 1815 que supuso el fin definitivo del imperio napoleónico-- el incidente entre el Rey don Juan Carlos y el presidente venezolano, Hugo Chávez, ocurrido en la última sesión de la XVII Cumbre Iberoamericana celebrada en Santiago de Chile, y consideró que éste obtuvo una "victoria de gran trascendencia".

En las "Reflexiones" que publica en el diario oficial 'Granma', Castro opinó que "nunca había tenido lugar un diálogo parecido entre jefes de Estado y de Gobierno, que en casi su totalidad representaban países saqueados durante siglos por el coloniaje y el imperialismo", refiriéndose a la conquista española en el continente sudamericano.

A juicio del mandatario cubano, "el sábado 10 de noviembre de 2007 --día del incidente en la Cumbra-- pasará a la historia de nuestra América como el día de la verdad".

Castro explica en su artículo que "el Waterloo ideológico ocurrió cuando el Rey de España le preguntó a Chávez de forma abrupta: '¿Por qué no te callas?'" y que "en ese instante, todos los corazones de América Latina vibraron".

En este sentido, afirma que "el pueblo venezolano, que debe responder sí o no el próximo 2 de diciembre --en el referéndum que daría a Chávez el derecho a ser nombrado presidente indefinido--, se estremeció al vivir de nuevo los días gloriosos de Bolívar". "Las traiciones y los golpes bajos que recibe diariamente nuestro entrañable hermano no harán cambiar ese sentimiento de su pueblo bolivariano", señala Castro.

TEMIÓ POR SU VIDA

Además, el mandatario indica que cuando Chávez atendió a los medios de comunicación a su llegada al aeropuerto de Caracas procedente de Chile, temió que "un asesino a sueldo del imperio, un oligarca envilecido por los reflejos que sembró la maquinaria de publicidad imperial o un perturbado mental podrían poner fin a su vida" dadas las "circunstancias actuales y la victoria ideológica de gran trascendencia obtenida por él".

"Es imposible apartarse de la impresión de que el imperio y la oligarquía se esmeran por conducir a Chávez a un callejón sin salida poniéndolo fácilmente al alcance de un disparo", apunta.

Para el presidente de Cuba, quien cedió hace casi un año y medio los poderes a su hermano Raúl debido a su delicado estado de salud, en el caso de Venezuela "la victoria no se debe convertir en terrible revés, sino en victoria mucho mayor, para evitar que el imperialismo conduzca al suicidio a nuestra especie".

En su opinión, "hay que seguir luchando y corriendo riesgos, pero no jugar todos los días a la ruleta rusa o al cara o cruz de una moneda". "Nadie escapa de los cálculos matemáticos. En tales circunstancias deben usarse preferiblemente los medios modernos de comunicación que transmitieron al mundo en vivo y en directo los debates de la Cumbre", concluye el artículo.