CARACAS, 4 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Cuba, Hugo Chávez, acusó al director nacional de Estados Unidos, Dennis Blair, de intentar desestabilizar su Gobierno para instaurar un régimen de derecha "subordinado" a la potencia norteamericana y rechazó las acusaciones vertidas en el informe anual de dicho organismo donde tildó de represor al Ejecutivo venezolano por reducir a los opositores y manifestantes y atentar contra la libertad de expresión.
El director de Inteligencia presentó el pasado martes ante el Senado de Estados Unidos un informe donde se acusaba al mandatario venezolano de reducir la libertad de expresión, hostigar y reprimir a los opositores, así como a los participantes en las numerosas manifestaciones contra el Gobierno bolivariano. El documento hizo especial hincapié en la tendencia del dirigente a promover alianzas antiestadounidenses con Cuba, Bolivia, Ecuador y Nicaragua.
Tras la presentación del informe, el líder socialista expresó su sorpresa porque sea precisamente Inteligencia el autor de estas afirmaciones, lo que, en su opinión, es una señal inequívoca de que la intención que subyace en el documento es derrocar a su Gobierno e instaurar en su lugar un régimen "subordinado al imperio yanki".
"Es algo bien delicado, y una señal muy poderosa del imperio y su resolución a continuar atacando a Venezuela, a su Gobierno revolucionario y a mí en lo personal", dijo el mandatario en una entrevista en la cadena estatal Venezolana de Televisión (VTV).
En la misma línea, Chávez no descartó que Washington se apoyara en la oposición del país iberoamericano para organizar un golpe de Estado y expulsarle definitivamente del poder, tal y como ocurrió en Honduras el pasado 28 de junio y advirtió de que el asesinato podría ser otra de las vías de actuación de sus vecinos del norte.
En consecuencia, el dirigente instó al pueblo venezolano a movilizarse en contra de estos ataques y a demostrar su apoyo al Gobierno bolivariano. "Esa es una de las razones por la que no podemos abandonar las calles, hay un contraataque imperial y la oposición se siente protegida", aseguró el jefe de Estado el mismo día en que se conmemora la rebelión cívico-militar contra la gestión del ex presidente Carlos Andrés Pérez.