MADRID, 10 Feb. (EUROPA PRESS) -
El embajador estadounidense en Madrid, Eduardo Aguirre, insistió hoy en que el veto de la Administración Bush para el uso de tecnología estadounidense en la venta de aviones a Venezuela, "no está enfocado hacia España" sino hacia los intereses de Estados Unidos con el país sudamericano.
En declaraciones a Onda Cero recogidas por Europa Press, Aguirre subrayó que el Gobierno de Hugo Chávez "ha ido progresando, quizás la palabra es regresando, en su política interna y externa, así como en sus declaraciones de exportación de revolución bolivariana".
En este sentido, la decisión tomada por Washington "sobre los aviones no está enfocada hacia España, sino hacia nuestros intereses en Venezuela". Además, recordó que es una decisión que se ha tomado "con otros países cuando la tecnología se usa para determinados fines".
El embajador hizo hincapié en que las relaciones bilaterales con España son "excelentes" y que Washington y Madrid están trabajando de cerca "en diferentes canales y en conversaciones y negociaciones continuas en multitud de puntos".
"Desde los siete meses que llevo en España, he notado que el nivel de la conversación que tenemos con los diferentes ministerios es sólido, es amplio y no quedan temas por abordar, en el mutuo respeto que ambos países tienen", constató.
Respecto a Cuba, censuró el "control absoluto" que ejerce el régimen de Fidel Castro sobre la libertad de expresión. "Se revira para que no se pueda comunicar nadie con el pueblo cubano. Es una lástima; más de lo mismo... Llevamos ya más de cuatro décadas sin que el pueblo cubano pueda vivir las libertades que hoy en día estamos sintiendo aquí en España. Ustedes no podrían existir en Cuba", apuntó.
Asimismo, confesó que no ha leído a ningún autor cubano que vive en la isla. "Sólo he leído a Oscar Hijuelos y a Carlos Eire, de origen cubano, pero que viven en Estados Unidos. No he leído nada que haya salido de la Cuba comunista. No estoy en esa área literaria", precisó.
A continuación, valoró la situación creada con la victoria de la formación islamista Hamás en las elecciones palestinas. "La victoria de Hamás se debe en parte al desencanto del pueblo palestino con el anterior gobierno, al que se le tilda de alta corrupción. Nosotros quiremos que Hamás renuncie a la violencia, reconozca a Israel y reanude las negociaciones para que el pueblo palestino pueda vivir en paz en esa región", reclamó.
En último, opinó sobre las reacciones violentas por las caricaturas del profeta Mahoma en la prensa europea. "En democracia no hay que ofender a otras culturas y religiones, pero también hay que reconocer que la democracia está fundada en la libre expresión y en la prensa libre. Eso es inconfundible, mientras que la violencia es inaceptable. No se puede permitir", concluyó.