Actualizado 01/06/2016 23:30

Maduro amenaza con una "resistencia histórica" si la OEA activa la Carta Democrática contra Venezuela

Nicolás Maduro
REUTERS


CARACAS, 1 Jun. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha amenazado con una "resistencia histórica" si finalmente la Organización de Estados Americanos (OEA) sucumbe a las "fuerzas imperialistas" y activa la Carta Democrática contra el país por una ruptura del "orden constitucional".

Maduro ha indicado que, si la OEA avanzara hacia una "intervención de Venezuela", "tocaría iniciar una resistencia histórica que llevaría a una batalla hasta la victoria final del pueblo venezolano ante las fuerzas imperialistas".

"Venezuela no será dominada por ningún imperio, ni por la OEA, ni por la basura que es el secretario (general Luis) Almagro", ha dicho desde el Palacio de Miraflores al término de una marcha de jóvenes oficialistas por Caracas, según informa 'El Nacional'.

El líder 'chavista' ha apelado a una movilización de los jóvenes "para defender la libertad de la patria". "Necesitamos una revolución en los liceos y universidades del país, una revolución de la calidad, de los valores", ha afirmado.

Maduro ha llamado directamente a los jóvenes a "profundizar la lucha contra los antivalores consumistas y violentos del imperialismo". "Cada vez que sale un muchacho con una pistola a matar y a secuestrar es una derrota para la nueva generación", ha subrayado.

DEBATE EN LA OEA

Almagro ha solicitado una reunión del Consejo Permanente de la OEA para decidir la posible aplicación de la Carta Democrática a Venezuela al considerar que ha habido una ruptura del "orden constitucional" por el quiebre del equilibrio entre los poderes del Estado y las violaciones de los Derechos Humanos.

El jefe del bloque regional ha accedido así a la petición formulada personalmente por representantes de la Mesa de Unidad Democrática (MUD) en una reunión que tuvieron el mes pasado en la sede de la OEA, en Washington.

La tensión política en el país se ha disparado tras la victoria de la MUD en las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre, que ha obligado a una cohabitación inédita en Venezuela, con la oposición en la Asamblea Nacional y Maduro en el Gobierno.