Actualizado 22/03/2017 18:04

Maduro indica que la Carta Democrática no es aplicable en Venezuela

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro
PRESIDENCIA VENEZUELA

MADRID, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha asegurado este martes que la Carta Democrática Interamericana a la que el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, quiere invocar por la ruptura del orden constitucional no se puede aplicar en el país.

Según declaraciones recogidas por el diario 'El Nacional', Maduro ha indicado que este documento "no tiene ninguna aplicación en Venezuela", y ha acusado a la OEA de estar "buscando" que en el país se genere una "confrontación".

"Estamos tomando las medidas para preservar el derecho que tiene Venezuela de seguir trabajando", ha indicado el mandatario, en el marco del consejo de ministros celebrado este martes en el Palacio de Miraflores, en Caracas.

Asimismo, ha afirmado que desde Caracas se han comunicado con "varios gobiernos" con los que ha "hablado claro" y ha insistido en que Venezuela no aceptará que ningún Ejecutivo "se meta en los asuntos internos" del país.

La oposición venezolana ha hecho valer su mayoría en la Asamblea Nacional para aprobar un documento en el que apoya la propuesta del la Carta Democrática en una votación con la que, según el diputado Luis Florido, el Parlamento "se coloca al frente de la lucha" para lograr que se respete a un pueblo "que sufre".

El documento aprobado por la Asamblea recuerda la colaboración entre este órgano parlamentario y otras instituciones internacionales para "buscar mecanismos pacíficos de resolución de conflictos", si bien por el momento el Gobierno de Nicolás Maduro y los grupos opositores siguen sin acercar posturas.

La Carta Democrática contempla un mecanismo para los casos de ruptura del orden constitucional en alguno de los países de la OEA que puede acarrear su suspensión en el bloque hemisférico hasta que se reconduzca la situación a la legalidad.

Almagro sostiene que su invocación es la única "herramienta" para devolver al país sudamericano a la senda democrática, ya que considera que "hay una ruptura total del orden democrático".

El Gobierno de Maduro, sin embargo, ha expresado su "profundo repudio" por el último informe difundido por Almagro, a quien ha catalogado como "conocido enemigo del pueblo de Venezuela". Según Caracas, el responsable de la OEA quiere "promover la intervención internacional" y "acentuar la guerra económica".