Actualizado 30/01/2013 06:27

La ONU advierte del "alarmante patrón de violencia en las cárceles venezolanas"


CARACAS, 30 Ene. (EUROPA PRESS) -

Naciones Unidas ha expresado este martes su preocupación por "el alarmante patrón de violencia en las cárceles venezolanas", después de que 58 presos murieran y más de un centenar resultaran heridos en un motín en la cárcel de Uribana, ubicada en el estado de Lara (noroeste).

"Este último caso refleja el alarmante patrón de violencia que hay en las cárceles venezolanas", ha considerado el portavoz del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Rupert Colville, en una rueda de prensa.

Colville ha sostenido que "es una consecuencia directa de las malas condiciones de las cárceles venezolanas", entre las que ha mencionado "el hacinamiento, la falta de acceso a los servicios básicos y a la presencia generalizada de armas de fuego".

El portavoz de la ONU también ha señalado a "las demoras judiciales y al excesivo recurso a las detenciones preventivas". "Son factores que exacerban este patrón de violencia", ha sostenido.

Además, ha recordado que "los estados son garantes de la vida y de la integridad física de las personas privadas de libertad, por lo que son responsables de lo que les suceda". "Las autoridades deben garantizar que las condiciones de detención son las adecuadas", ha subrayado.

Así, ha instado al Gobierno venezolano a "promover una investigación efectiva sobre el motín en la cárcel de Uribana, a ser posible, que concluya con la identificación de los responsables y una compensación a las víctimas y a sus familias".

En términos generales, ha urgido al Ejecutivo a "desarrollar una política penitenciaria global para garantizar que se dan las condiciones adecuadas, conforme a los estándares del Derecho Humanitario, y capacitar al personal".

No es la primera vez que Venezuela vive una crisis penitenciaria. El peor episodio se vivió en junio de 2011, cuando presos de la cárcel El Rodeo, ubicada a 30 kilómetros de Caracas, se amotinaron durante un mes, dando lugar al despliegue de las fuerzas de seguridad. Según el Gobierno, murieron 20 presos, aunque los familiares hablan de un centenar.

Desde las propias cárceles y desde organizaciones defensoras de los Derechos Humanos se ha denunciado insistentemente el hacinamiento en las prisiones venezolanas. Tras la crisis de El Rodeo, el Gobierno se comprometió a solucionar el problema, pero aún no lo ha hecho.