CARACAS, 6 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente del partido opositor Comité de Organización Política Electoral Independiente (COPEI), Roberto Enríquez, ha solicitado este lunes retomar el diálogo en la Asamblea Nacional tras la violencia desatada la semana pasada contra diputados opositores tras la renuncia a reconocer a Nicolás Maduro como vencedor de las elecciones presidenciales del 14 de abril.
La semana pasada, diputados oficialistas y opositores se enfrentaron física y verbalmente en la sede legislativa, dejando un saldo de al menos siete heridos, en una acción que unos y otros se han atribuido y que sus respectivos líderes ya han condenado.
Los diputados opositores aseguran que la pelea comenzó cuando hicieron sonar 'vuvuzelas' (bocinas) y desplegaron una pancarta en la que podía leerse: 'Golpe al Parlamento', por la decisión del presidente de la Asamblea, Diosdado Cabello, de no darles la palabra.
Los diputados opositores recibieron golpes de la bancada oficialista. En cambio, el jefe del grupo parlamentario del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Pedro Carreño, sostuvo que fueron los diputados opositores quienes agredieron a los legisladores 'chavistas'.
"Sin condicionamiento alguno a lo que establece la Constitución nacional, pido que se retome el debate de ideas y cancelemos el intercambio de ofensas, insultos y particularmente las agresiones", ha solicitado el dirigente opositor.
"Cuando el Parlamento no funciona adecuadamente, no funciona la democracia porque esa es la esencia, la columna vertebral de la representación popular y, por lo tanto, del juego democrático de toda sociedad", ha apostillado Enríquez.
Venezuela debe "reinstitucionalizar la normalidad, el debate, la discusión en la Asamblea Nacional para que no se repitan acontecimientos tan lamentables", ya que, según el dirigente opositor, todos los venezolanos "pierden".
Enríquez ha asegurado que los diputados opositores Edgar Zambrano y Carlos Berrizbetia "realizarán un esfuerzo serio, responsable" dirigiendo los acercamientos al chavismo para devolver al Parlamento "el debate plural como garantía al derecho que tienen los venezolanos a sentirse representado políticamente".
"No hay razón para que mañana se repitan acontecimientos, donde se le impide el derecho de palabra a un parlamentario y después se apela a cualquier forma de violencia", ha añadido.